Si una normativa es cambiante en nuestro país es la referente al carril bus. No todos los consistorios permiten circular a los mismos vehículos por él y lo que está prohibido por un Ayuntamiento está permitido por otro. Te contamos qué hay de común entre las normativas y en qué difieren.
Hay tres servicios que en todas las ciudades pueden circular por el carril bus. El primero, lógicamente, es el autobús. Parece una perogrullada, pero es bueno no pasarlo por alto. Los taxistas también pueden circular en todos los casos por este carril, ya que se trata de un servicio público de transporte. Y, por último, los servicios de emergencia tienen habilitado este carril si lo necesitan.
A partir de aquí, sólo encontramos un hecho común entre los ayuntamientos y tiene que ver con una restricción: los VTC no pueden circular por este carril. Hay que tener en cuenta que las licencias VTC las poseen empresas privadas, por lo que no prestan un servicio público y no tienen permitido el uso del mismo.
Algunas variaciones entre ciudades
Y una vez que salimos de nuestra ciudad de origen, veremos como las normativas son cambiantes. En Madrid, por ejemplo, el bus está limitado, salvo que la señalización diga lo contrario, a los taxis y los autobuses. En algunos casos, las motocicletas también tienen permitida la circulación y, en unos pocos, la señalización también permite el paso de ciclistas. En este caso, las bicicletas tienen que moverse lo más a la izquierda posible del carril.
En Barcelona, al contrario, no se contempla que las motocicletas puedan circular por el carril bus en ningún caso, siendo motivo de debate en el Ayuntamiento, tal y como recogió hace algunos meses La Vanguardia.
En Sevilla un error en la redacción de la norma ha permitido a los vehículos híbridos formar parte habitual del carril bus. El objetivo del consistorio era favorecer a los automóviles eléctricos permitiendo su paso por este carril restringido. Sin embargo, ABC recoge que el último cambio en el Reglamento del Vehículo no hacía distinción entre automóviles eléctricos completos o híbridos, calificándolos a todos de eléctricos. Así los automóviles híbridos tienen abierto el paso por un vacío legal.
En Zaragoza, el Gobierno de la ciudad también ha pensado en la misma medida, aunque de momento no se ha aplicado. El objetivo es permitir que los automóviles eléctricos también puedan desplazarse por dicho carril a fin de fomentar sus compras, pero el Heraldo recoge que la intención del Ayuntamiento es limitar su circulación cuando el volumen de este tipo de coches sea numeroso.
En Bilbao, sin embargo, los carriles bus también permiten la circulación de las bicicletas siempre que la señalización lo permita. En concreto se llaman carriles bus-bici y en ellos se especifica que tendrán que compartir espacio con los servicios públicos (tanto de transporte como de emergencias) y algunos agentes privados, como los residentes o carga y descarga en circunstancias muy especiales.