A vueltas con la A-68

El peaje de la autopista que une Zaragoza y Bilbao sigue provocando declaraciones desde las diferentes fuerzas políticas.

La rebaja del peaje y la renovación de la concesión de la autopista A-68 está provocando diferentes reacciones en los diferentes sectores políticos desde que fue anunciado hace unos días por la Administración central. Para el diputado general de Álava, Ramón Rabanera, esta rebaja (de un 40 por ciento) es insuficiente y prevé la negociación para alcanzar un aumento en el descuento. De parecida forma opina el Partido Aragonés (PAR), que ha pedido al Gobierno aragonés que estudie la forma de rescatar o expropiar dicha concesión. Según el PAR, la rebaja no satisface el compromiso de solución integral propuesto para acabar con los problemas existentes en esta vía. Por su parte, el PNV se ha opuesto a la prórroga a la concesionaria Vasco Aragonesa por parte del Gobierno, ya que considera que debería traspasarse a las instituciones vascas, no a una entidad privada.
Por otra parte, el ministro de Fomento, Rafael Arias Salgado, declaró que la Autovía del Cantábrico es la "principal obra de infraestructura de España desde el punto de vista técnico". Además, comentó que se salvará la ría de Villaviciosa con la construcción de un túnel y de un viaducto. Los informes de impacto ambiental de estas obras, que debe elaborar el Ministerio de Medio Ambiente, se están retrasando, porque, según Arias Salgado, la orografía asturiana complica su realización.