Rolls-Royce: un siglo de esplendor

Aprovechando que ha cumplido 100 años, Rolls Royce, la marca de lujo por antonomasia, ha elaborado un interesante y sorprendente prototipo. Se trata del 100EX, un cuatro plazas descapotable con carrocería de dos puertas.

Construido sobre la base del Phantom, aunque algo más corto y más bajo, este recién llegado utiliza un bastidor de aluminio y luce unas colosales llantas de 21 pulgadas para neumáticos de 255/50 delante y 285/45, detrás.El motor es un espectacular atmosférico de 9 litros con arquitectura de 16 cilindros en V y 64 válvulas. Para gestionarlo, en Rolls han elegido un cambio automático de seis relaciones.

Ahora, la idea es mezclar espíritu deportivo, lujo y excelencia técnica. Por eso el coche tiene algo de estilo clásico, con formas muy rectilíneas, casi apuntando a los inicios de la automoción europea. También está esa concesión a la estética deportiva que es la carrocería convertible, que va rematada por un techo retráctil elaborado en materiales muy modernos y ligeros. En el interior, cuero y lana de Cachemira se combinan en los tapizados, que van rematados con acabados metálicos y de madera. Las puertas se abren en sentido contrario a la marcha, con lo que mejora el acceso al habitáculo. Por supuesto, sobre la parrilla frontal se enseñorea la mítica estatuilla del Espíritu del Éxtasis.

Este EX100 es el primer coche experimental que se fabrica en Rolls desde que lanzaron el Phantom en enero del año pasado. Pese a su impresionante estampa, nunca llegará a la línea de montaje.