Argentina pagará sus deudas a los fabricantes de coches

Hace dos años, Argentina lanzó el denominado "Plan Canje", un programa de ayudas para modernizar su parque móvil. Eso sí, ahora, precisamente cuando atraviesa una de las peores crisis económicas de su historia, tiene que comenzar a pagar las deudas contraídas con los fabricantes.

El Gobierno argentino emitirá 350 millones de dólares (397 millones de euros; más de 66.055 millones de pesetas) para pagar a las fábricas de automóviles afincadas en su territorio. Con esta medida, el equipo de Duhalde quiere contentar a las principales marcas, que ya han empezado a anunciar recortes en su producción y despidos.

Con estos bonos, cubrirán el denominado "Plan Canje", por el que aquellos que cambien sus automóviles de más de diez años de antigüedad por otros nuevos reciben sustanciosas rebajas, gracias a los subsidios públicos y a las ayudas de los fabricantes.

Por otra parte, el Mercosur y en concreto Brasil ha anunciado que echará una mano a la maltrecha economía argentina. Así, los dirigentes brasileños han expresado la necesidad de modificar el acuerdo para el comercio bilateral de coches, mediante medidas que compensen los desfases y regulen la cantidad de piezas de fabricación nacional que deben tener los vehículos.

Durante el año pasado, la industria de la automoción ha entrado en barrena a causa de la recesión que sufre el país desde mediados de 1998: en 2001, la producción y venta de vehículos han caído más de un 40 por ciento.