A bordo del Pegasus de la DGT

Vigila desde hace dos años nuestras carreteras, sobre todo las secundarias, y es el radar más eficaz de todos los que dispone la DGT, se trata de Pegasus y en puertas de la Operación Salida de Semana Santa nos hemos subido a él.

Alicia Fernández. Twitter: @aliciautopista

A bordo del Pegasus de la DGT
A bordo del Pegasus de la DGT

Dos años han pasado desde que el Centro Español de Metrología diera el visto bueno al radar de helicóptero Pegasus y éste empezara a vigilar las carreteras de nuestro país multando a los infractores de velocidad. Gracias a su posición privilegiada se ha mostrado desde el principio como un radar muy eficaz, logrando una mayor tasa de multas por vehículo controlado. Realizamos en uno de los seis helicópteros Pegasus (próximamente se incorporarán dos más) un vuelo de vigilancia en plena Operación Salida de Semana Santa.

Un operador de vídeo y cámara acompaña al piloto en cada vuelo. Aquél es el encargado de hacer funcionar el sofisticado mecanismo de este especial helicóptero. Dispone de dos cámaras, una panorámica y otra de detalle, la primera facilita el seguimiento y la captación de la velocidad, y la segunda, dotada con teleobjetivo, puede leer la matrícula. El helicóptero toma imágenes tanto por delante como por detrás del vehículo. El detalle de las cámaras del Pegasus  es extraordinario, pueden llegar incluso a leer el texto que un conductor al volante esté enviando o leyendo. Como radar tienen un alcance de un kilómetro.

Si bien las carreteras secundarias son su principal objetivo, ya que en ellas suele ser más difícil establecer controles de radar, dicen desde la DGT, el hecho de haber puesto en marcha la campaña de vigilancia especial de vías convencionales desplazado los móviles de las de alta capacidad a éstas, también las autovías son vigiladas por Pegasus. Al haber muchos tramos de vía con velocidad variable, el operador de cámara se ayuda de una pequeña tableta para saber a qué velocidad debe de circular el vehículo vigilado. Su margen es amplio, de un 10 por ciento, a pesar de que está homologado con un error entre el 1 y el 3 por ciento por Metrología.