Este cambio es bueno y necesario, ya que ha de servir para que haya pilotos jóvenes que puedan acceder a la F1, siempre y cuando cumplan con la nueva normativa y hayan dado muestras de ser capaces de estar a la altura de lo que se exige para llevar un F1.
El cambio votado por el Consejo Mundial para poder solicitar la súper licencia era algo necesario. Hasta ahora hacían falta 40 puntos acumulados en tres años y se ha pasado a 30 puntos en cuatro años. Se tomará en consideración el mayor número de puntos acumulados en las tres mejores temporadas disputadas en los últimos cuatro años, incluido el 2020.
Una importante bajada en las exigencias. Los pilotos que se queden en los 30 puntos deberán demostrar cualidades suficientes para obtener la súper licencia, que básicamente serán los 300 km que han de hacer con un F1, o incluso ni eso. Si han tenido actuaciones destacadas, aunque no hayan logrado puntuar por consecuencias ajenas.
Tatiana Calderón y muchos pilotos de la F2 podían estar 10 años en la F2 y no tener nunca acceso a la súper licencia. Un piloto podía liderar carreras y estar siempre en las primeras posiciones, pero si tenía mala suerte de no terminar carreras, en consecuencia nunca sumaba puntos suficientes para acceder a la F1.
El año pasado en el GP de Gran Bretaña de los dos hermanos Fittipaldi, Enzo de 19 años y Pietro de 23, el único que podía tener aspiraciones de lograr la súper licencia era el pequeño en virtud de los resultados obtenidos en la F4. Con su experiencia en la F3 italiana y alemana tenía puntos suficientes, mientras que su hermano mayor Pietro, probador de Haas, y con mucha más experiencia, aún no podía aspirar a ella.
Incongruencias como esa han habido muchas que han perjudicado a pilotos como Roldán Rodríguez, que fue uno de los más perjudicados por el sistema que había para acceder a la súper licencia y fue engañado por algunos intermediarios y por Colin Kolles. Éste último finalmente se vio obligado por la justicia británica a devolver al vallisoletano lo pagado para ser piloto del equipo Force India en sus principios. El sistema que imperaba hace diez años facilitaba el “timo” de la súper licencia a jóvenes pilotos.
Ahora, con la bajada de puntos obligatorios de 40 a 30, pilotos como Tsunoda, Mazepin o Mick Schumacher podrán contar con la súper licencia y comenzar a negociar con los equipos de F1 para el año que viene. Sin este nuevo cambio de reglamentación, debido también a la COVID-19. Estos tres pilotos tendrían que esperar al 1 de diciembre para negociar su futuro en función de las dos últimas carreras de la temporada en Baréin y los resultados conseguidos en ellas.
Esto abre nuevas posibilidades a jóvenes pilotos con suficientes apoyos que sirven para darles la oportunidad de acceder a la F1, y también para que los equipos cuenten con más ingresos gracias a pilotos de pago del viernes, que no es el caso de estos tres.
