Había comenzado la década de los 90 y España se preparaba para organizar los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla. Los niños que nacieron durante esos años hoy forman la franja de conductores más jóvenes, y han crecido en plena expansión de SUV y crossover, un fenómeno reciente, pero sin reflejo en los coches que más se vendían en aquella época y que seguro formaron parte de sus familias o tuvieron amigos. Estos son los protagonistas de entonces:
Renault 19
El Renault 19 fue el coche más vendido en España en 1991 y era un modelo de tamaño similar al VW Golf de la época. Los compactos —coches que rondaban los 4 m de longitud— eran los que más solicitados entonces. El R-19 fue el último Renault que llevó un número por nombre y tuvo variantes de tres y cinco puertas, sedán —llamado Chamade un tiempo— y hasta un descapotable realizado junto a Karmann. Contó con motores, gasolina y diésel, de entre 60 y 140 CV, el más potente el de la versión 16V de la imagen, que pasaba de 0 a 100 km/h en 8,5 s y lograba 215 km/h.
Renault Clio
La marca francesa era la más vendida en esa época en España y este mítico utilitario también gozó de un gran éxito nada más aterrizar con su primera generación y dar el relevo al Supercinco. El Renault Clio contó con carrocerías de tres y cinco puertas, y motores de 48 a 147 CV —versión 2.0 16V Williams—. En 1991 logró el galardón de Coche del Año en Europa. El año pasado debutó su quinta generación, que es la que actualmente está a la venta.
Citroën ZX
Este compacto de la marca francesa completó en 1992 el podio de los más vendidos junto a los dos modelos ya citados de Renault. El Citroën ZX era un rival directo del R-19, tenía carrocería de tres y cinco puertas, y también una variante familiar Break. Contó con motores de 60 a 163 CV, y en su historia quedan las victorias de la variante Rally-Raid en el París Dakar con Ari Vatanen (1991) y Pierre Lartigue (1994, 95 y 96) a los mandos, aunque obviamente el coche de competición poco tenía que ver con el que se vendía en los concesionarios.
Opel Astra
La primera generación de este modelo se lanzó en 1991, para sustituir al famoso Kadett, y en 1993 se convirtió en el coche más vendido en nuestro país, doblegando el poderío francés de la época. Se comercializó con carrocerías de tres y cinco puertas, sedán de cuatro puertas, familiar con denominación Caravan e incluso como Cabrio, diseñado por Bertone. Su gama de motores ofrecía potencias entre 57 y 204 CV —en el Turbo 16V—. En la actualidad está a la venta la quinta generación del Opel Astra.
Ford Escort
Fue el primer modelo global de Ford y contó con seis generaciones entre 1967 y 2004, aunque la que aquí nos ocupa es la quinta, que se fabricó en la planta valenciana de Almussafes para convertirse en el coche más vendido en España en 1994 y 1995. El Ford Escort contó con versiones de tres y cinco puertas, además de familiar y descapotable, mientras que la berlina de cuatro puertas se llamaba Orion. La gama de motores ofrecía potencias entre 59 y 224 CV, en este caso en el RS Cosworth —en la foto—, con una variante de competición de grandes éxitos en el Mundial de Rallyes. El testigo del Escort lo cogió el Ford Focus.
Opel Corsa
La segunda generación del Opel Corsa, lanzada en 1993, se hizo con la medalla de plata en cuanto a ventas en el 94 —superando al Astra— y con la de bronce en el 95, convirtiéndose en uno de los coches más demandados en aquellos años. Otro “made in Spain", hecho en la planta zaragozana de Figueruelas, que se ha convertido en un modelo muy popular en todo el mundo. Entonces contaba con motores de 50 a 106 CV, éste en el GSi 16V, disponible solo con carrocería de tres puertas. Actualmente se vende la sexta generación del Corsa.
Ford Fiesta
El utilitario de Ford estaba en su tercera generación —su andadura arrancó en 1976—cuando en 1995 fue el segundo coche más vendido en España, solo superado por su hermano mayor el Escort, y ganando en su categoría a modelos tan importantes como Corsa, Ibiza, 205 o AX. El Ford Fiesta contó con motores de 45 a 133 CV, destacando por prestaciones las versiones XR2i y Turbo. Actualmente está a la venta la séptima generación de este histórico de la marca del óvalo.
Seat Ibiza
En 1993 arrancaba la vida comercial de la segunda generación del Seat Ibiza —debutó en el mercado en 1984—, en cuyo diseño trabajó Giorgetto Giugiaro , un modelo que fue el encargado de inaugurar la producción de la fábrica de Martorell y que compartía plataforma y otros componentes con el VW Polo de la época. Entre 1996 y el año 2000 siempre estuvo en el podio de modelos más vendidos en España, sumando a las carrocerías de tres y cinco puertas el sedán Córdoba o el familiar Vario. Contó con motores de 45 a 150 CV —en el Cupra—, aunque su gran éxito radicó en la enorme aceptación de las variantes GTi 130 CV y TDi de 90 y 110 CV. Hoy se vende la quinta generación.
Renault Mégane
En 1995 llegó el sustituto del R-19 que también suponía un cambio de concepto y la creación junto al hatchback de cinco puertas de un coupé de dos puertas, un sedán, un cabrio, un familiar y hasta un monovolumen —empezaba otra moda— que se llamaba Scénic. Del 97 al 99 el Renault Mégane fue líder de ventas en España y se ofreció con motores de 65 a 150 CV, apostando por versiones superdeportivas en generaciones siguientes. Actualmente se vende la cuarta generación.
Citroën Xsara
A finales de 1997 se produjo el lanzamiento del nuevo compacto de la marca francesa. El Citroën Xsara peleó cuerpo a cuerpo con el Mégane en los años 98 y 99, para destronarle en el 2000 y convertirse en el coche más vendido en España justo en el cambio de siglo. La gama del Citroën Xsara incluía versiones de tres y cinco puertas y el familiar Break, sumando igualmente una variante monovolumen con denominación Picasso. La potencia de los motores oscilaba entre 75 y 167 CV, con un gran éxito de los HDi de 90 y 110 CV. La versión de competición, con Sebastien Loeb a los mandos, logró grandes triunfos en el Mundial de Rallyes entre 2003 y 2006.
