Los rallies del siglo pasado, en Barcelona

A lo largo del fin de semana se ha celebrado la 45ª edición del Rally Internacional Barcelona-Sitges, reservado a coches de época y que, un año más, ha contado con el patrocinio de Audi.

Los rallies del siglo pasado, en Barcelona
Los rallies del siglo pasado, en Barcelona

La Sociedad Fomento del Turismo de Sitges, el Real Automóvil Club de Cataluña (RACC), el Antic Car Club de Cataluña, Audi y los ayuntamientos de Barcelona y Sitges han organizado, un año más, el rally internacional entre estas localidades.Esta original carrera, que ha cumplido su 45ª edición, está considerada como una de las más importantes del mundo en su categoría, lo que propicia que gran cantidad de público se dé cita a lo largo del recorrido, que este año comenzó en la plaza Sant Jaume y finalizó en el puerto de Aiguadolç, en Sitges. Entre los espectadores se encontraban el ex–campeón mundial de motociclismo Emilio Alzamora y el antiguo futbolista José Mari Bakero, quienes admiraron los vehículos, fabricados entre 1908 y 1924, y las vestimentas de sus ocupantes, ataviados según la época de construcción de su coche.El acierto a la hora de recrear en sus ropas el estilo de principios del siglo pasado permitió a los pasajeros de un De Dion Bouton de 1920 ganar el premio a la Elegancia. Una gran parte de los 80 participantes en la caravana obtuvieron algún trofeo, pues había galardones para los cinco primeros clasificados en cada grupo. Así, en el primero (vehículos anteriores a 1908), el Napier 1907 de Ramón Magriñá fue el vencedor, mientras que el Panhard Levassor 1913 de Joan R. Aragonés obtuvo el primer puesto entre los coches construidos de 1909 a 1914. En el grupo III (1915-1920), el ganador fue el Elizalde 1918 de Joan Mujal, dejando al Buick 1924 de Emilio Ripollés la primera plaza en la clasificación de la categoría Vintage (1921-1924). Aún hubo más galardonados, ya que el RACC otorgó el Trofeo Miru Aumacellas (instituido en memoria del que fue director del Rally Barcelona-Sitges durante 38 años) a Miguel Cases y su Hotchkiss-AM de 1924. Michelin, por su parte, premió al vehículo que montara sus neumáticos y que, además, estuviera mejor conservado: un Renault de 1908 propiedad del Ayuntamiento de la Ciudad Condal. La prueba no finalizó con la llegada a Sitges: ayer, los participantes –esta vez, sin sus trajes de época- visitaron diferentes museos y las instalaciones de Cavas Segura Viudas en San Sadurní d’Anoia.