Rallye de España - sábado: Ogier controla en cabeza

Poco más de setenta km contra el crono separan ya a Sébastien Ogier (Volkswagen Polo WRC) de su segundo título de Campeón del Mundo de Rallyes. El francés, que arrancaba la jornada de hoy con 36.6 segundos de ventaja sobre su compañero Jari-Matti Latvala, disfruta ahora de 27.3 segundos, tras administrar su ritmo y acomodarlo al de su compañero y rival. Dani Sordo (Hyundai i20 WRC) está en la quinta posición, después de subir dos posiciones gracias a los problemas de Andreas Mikkelsen (VW) y el abandono de Robert Kubica (Ford Fiesta WRC).

Fernando Albes. Twitter: @fernandoalbes

Rallye de España - sábado: Ogier controla en cabeza
Rallye de España - sábado: Ogier controla en cabeza

La única posibilidad matemática que le quedaba a Jari-Matti Latvala para retrasar el alirón de su compañero en VW Sébastien Ogier era sumar al menos un punto más que el francés en España. Y esa posibilidad, muy debilitada desde la etapa de ayer, cada vez tiene menos vida según avanza la carrera, ya que el francés está aguantando el tipo en cabeza perfectamente y controla la situación sin aparentes agobios.

 

Esta mañana, con el arranque de la parte de asfalto del itinerario, Latvala ha mostrado un tono muy diferente al de ayer, cuando se encontraba sin respuesta a las prestaciones de su compañero Ogier. Ya solo le quedaba presionar todo lo posible para mantenerse cerca y, si era posible, intentar recortar algo, por si un trompo, pinchazo o percance de similar índole terminaba cambiando su suerte…

 

Y lo cierto es que el plan comenzaba bien para él en los tres tramos que componían la sección de la mañana, ya que Latvala se anotaba las tres victorias parciales en juego y conseguía arañar 8.3 segundos a Ogier. El francés declaraba rodar tranquilo y únicamente pendiente del ritmo de Latvala para acomodar el suyo al mismo, encarando la sección vespertina con un cómodo colchón de 28.3 de ventaja sobre su compañero.

 

En esa sección matinal brillaba con luz propia un inspirado Mikko Hirvonen, muy a gusto con el equilibrio de los nuevos Michelin en su Ford Fiesta WRC. Tanto, que el finlandés se lanzaba sin complejos a atacar a Andreas Mikkelsen y Mads Ostberg, a los que conseguía superar, haciéndose fuerte en el tercer puesto absoluto.

 

A esa batalla asistía por detrás un Dani Sordo al que ser el mejor Hyundai le aportaba un escaso consuelo, sobre todo viendo cómo pilotos teóricamente mucho menos cualificados que él en asfalto, como los tres nórdicos que le precedían marcaban sistemáticamente cronos mejores que los suyos. Y es que si en un escenario puede quedar en evidencia la falta de potencia de un coche, es en el asfalto. Y, tanto el efecto visual del Hyundai i20 WRC como el lenguaje gestual de Sordo, no conducían a pensar otra cosa que en una alarmante falta de caballos para competir de tú a tú con los Citroën e, incluso, los Ford, por no decir con los VW… A ello había que sumar una aún no total comunión chasis-neumáticos; mejor, en todo caso, que la mostrada en Francia

 

La alegría por el recorte de tiempo de la mañana no le duraba demasiado a Latvala, cuando Ogier le endosaba nada menos que 4.6 segundos en Escaladei-2, el tramo que abría la tarde. El finlandés respondía en el siguiente asalto, Colldejou-2, batiendo a su compañero por 5.0, pero el cómputo de ambos dejaba las cosas prácticamente como estaban.

 

Otro que tampoco arrancaba la tarde muy alegre, precisamente, era Andreas Mikkelsen, que se dejaba más de dos minutos y medio en segunda pasada a la especial más larga del rallye a raíz de un pinchazo. Ello hacía que Mikko Hirvonen respirara tranquilo, ya que ello le despejaba bastante el camino para alcanzar el podio. Dani Sordo era otro de los beneficiados, ya que ganaba un puesto y se situaba quinto, aunque a casi medio minuto de un Mads Ostberg que estaba aguantando el tipo bastante bien sobre el asfalto, no precisamente su superficie favorita. Sordo trataba de atacarle, pero los 0.4 segundos que conseguía limarle en el siguiente tramo hablaban por sí mismos del estado de las armas del español frente al noruego…

 

El día concluía con el scratch de Andreas Mikkelsen en el anecdótico tramo urbano de Salou (2.24 km), donde batía por 0.1 a Latvala y por 0.7 a Sébastien Ogier, que cerraba el día con 27.3 segundos sobre Latvala y todo a su favor para ganar a lo campeón.

 

La jornada de mañana, compuesta por cuatro tramos, se pondrá en marcha a las 6:30 (hora peninsular española), con el primer asalto cronometrado, La Mussara-1, a las 7:30.

 

Clasificación general, tras el TC13:

 

1º S. Ogier-J. Ingrassia (VW Polo WRC), 3:04.14.5

2º J.M. Latvala-M. Anttila (VW Polo WRC), 27.3

3º M. Hirvonen-J. Lehtinen (Ford Fiesta WRC), 1:18.6

4º M. Ostberg-J. Andersson (Citroën DS3 WRC), 1:48.3

5º D. Sordo-M. Martí (Citroën DS3 WRC), 2:10.4