La nueva película de Ron Howard, ‘Rush’, ya ha recibido el pistoletazo de salida en los cines de toda España. Lo hace tras mucho meses de trabajo en los que se ha tratado de recrear la rivalidad surgida en los años 70’ entre dos pilotos de Fórmula 1 totalmente opuestos. Por un lado, James Hunt –interpretado por Chris Hemsworth-, de carácter extrovertido y vida alocada. El atractivo ‘playboy’ inglés destaca por su falta de miedo a la muerte, sus excesos con el alcohol, sus escarceos con diversas mujeres y la búsqueda de la felicidad a cualquier precio son retratados en el film de Howard. Por otro lado, nos encontramos con Niki Lauda –encarnado por Daniel Brühl-, un hombre frío y en el que la improvisación no es una opción. El austriaco muestra un gran respeto a la muerte y no quiere asumir riesgos innecesarios, como el que a punto estuvo de costarle la vida aquel lluvioso 1 de agosto de 1976 mientras volaba con su Ferrari tratando de recortar el tiempo perdido con respecto a James Hunt –piloto de McLaren-.
‘Rush’ no sólo se centra en la Fórmula 1. De hecho, los aspectos técnicos a los que se aluden son bastante básicos. Quizá Howard ya fue avisado de que llegar al cine algo demasiado especializado le podría amargar la recaudación en taquilla. Pero la combinación entre coches de carreras y la vida fuera de ‘boxes’ de los pilotos se culmina de manera bastante lograda. Se exageran muchos aspectos de la biografía real de ambos pilotos, pero mantener la tensión y la adrenalina en películas de este tipo no es tarea fácil.
Lauda y Hunt no son tan enemigos como se pretende dar a entender y, por temas de derechos, algún que otro ‘sponsor’ y marca no aparecen plasmados en las carreras recreadas. Pero sólo los aficionados más expertos y seguramente los que vivieron aquel momento desde dentro serán capaces de notar esta falta de caracterización. Y es que en el accidente de verdad, Lauda estrenaba un casco de formas y colores distintos, el cual perdió en el impacto...Eso sí, el incidente se presenta fiel a la realidad en cuanto a movimientos en la pérdida de control del coche por parte de Niki y en los impactos posteriores que recibe ya con el coche en llamas.
Pero que los aficionados al mundo del motor no piensen que saldrán defraudados del cine. Las escenas de los coches de carreras suben de vueltas las pulsaciones del corazón y la piel se pone de gallina al oír los motores V12 rugiendo y haciendo volar por el asfalto a los monoplazas. Hasta Alexandra María Lara –que interpreta a Marlene Lauda- es la viva imagen de la primera mujer del piloto austriaco de Ferrari.
Nadie debería perderse esta historia de dos pilotos con dos formas distintas de entender la vida y la Fórmula 1.