Nada tiene que ver el nuevo Jaguar XE con el anterior X-Type, que nació fruto de una sinergia con Ford aprovechando el bastidor y tecnología del Mondeo de la época. No era un mal coche, pero tampoco se podía considerar un Jaguar puro, al menos no se sentía como tal. Ahora todo es completamente nuevo y está hecho en casa partiendo de cero. Las berlinas medias suponen un segmento muy importante y Jaguar ha decidido volver a él con garantías de lujo, deportividad, calidad y, sobre todo, un toque diferenciador como es el aluminio. Así es una moderna berlina de 4,67 metros de largo hecha con una elevada proporción de aluminio, más de un 75 por ciento. El resto lo forman aceros de alta resistencia y magnesio, que logran en conjunto un ligero monocasco de tan solo 251 kg. Estrena la nueva plataforma de Jaguar, de la que saldrán además de la berlina de cuatro puertas que hemos probado un familiar, un coupé y un cabrio. También se sumará una versión SUV de tracción total y corte dinámico.
El Jaguar XE ya está a la venta en España, pero no empieza a fabricarse hasta el mes de marzo, por lo que las primeras unidades llegarán a los concesionarios españoles en abril/mayo. Como adelanto, y antes de ser presentado oficialmente, Jaguar puso a nuestra disposición unas unidades pre-serie fabricadas en noviembre para que te pudiésemos anticipar unas primeras sensaciones de conducción. No estaban completamente terminadas ni contaban con toda la última tecnología que llevará el XE, pero al menos nos hemos hecho una idea muy aproximada de lo que será el modelo definitivo.
El XE lleva suspensión independiente en las cuatro ruedas, con un elaborado tren delantero de dobles triángulos, heredado del deportivo F-Type, y un complejo multibrazo trasero. Es propulsión trasera y dentro de un año también contará con tracción total. Desde el inicio dispone de una amplia gama mecánica, a la que sólo reprochamos la ausencia de una versión de acceso más económica y menos potente. Su oferta la forma un cuatro cilindros Diesel de 2 litros con 163 ó 180 caballos, otro 2 litros pero de gasolina con 200 ó 240 caballos y un V6 de 340 caballos, también en gasolina. Más adelante llegará una variante "R" que superará los 400 CV para dar guerra a los M, AMG y RS. Emplea cajas de cambio manuales de 6 velocidades (sólo para los Diesel) o automáticas de 8 marchas por convertidor de par.
La dirección es asistida eléctrica, siendo la primera berlina de Jaguar que la lleva. Además de los controles de tracción y estabilidad y de los distintos modos de conducción del Jaguar Drive Control (Eco, Normal, Invierno y Dinámico), añade lo que ellos denominan Torque Vectoring by Braking, sistema que mediante la frenada selectiva estabiliza con sutileza la dirección de la carrocería en cuanto detecta que se va a producir una situación crítica. Utiliza siempre suspensiones con muelles, con unos amortiguadores Bilstein de control electrónico en las versiones S.
La presentación general está a la altura de todos los productos de la Jaguar moderna y demuestra lujo y calidad. En las unidades que probé los ajustes no eran del todo adecuados, pero me aseguraron desde la marca que el modelo definitivo estará mucho mejor terminado. No falta un sistema de info-entretenimiento con pantalla táctil y sistemas como el Head up Display que proyecta la información principal en el parabrisas. Se vende con cuatro acabados diferentes y una extensa lista de extras que te permitirán personalizarlo. Delante hay buenos asientos y todo está en su sitio, con estudiada ergonomía y buen confort. Detrás las plazas no son las más grandes de su segmento en lo que a espacio longitudinal se refiere. Los asientos son cómodos y la altura no es problema, al menos para mis 1,79 m.
Eran pre-series, hasta el punto que los Diesel contaban con un enorme botón rojo en la consola central para detenerlo en caso de emergencia. Me llamó la atención la precisión de guiado del tren delantero, el aplomo y la respuesta general. Muestra deportividad y una excelente capacidad de tracción, poniéndose a la altura en comportamiento del que para mí es la referencia del segmento, el Mercedes Clase C. Pude probar el Diesel de 180 caballos. Me pareció un motor completo en cuanto a su respuesta y nivel prestacional, si bien para determinar sus consumos con mayor precisión habrá que esperar a que pase por nuestro Centro Técnico. Me pareció un poco ruidoso, a lo que los ingenieros de Jaguar respondieron de nuevo con lo de que no estaba totalmente terminado. Será un buen coche y no me cabe duda que una alternativa interesante a las tradicionales berlinas alemanes.