Es el año de Honda, y no sólo por su regreso como proveedor de motores en la F1, sino por la importancia de las novedades que, a efecto de producto, nos depara 2015, entre ellas, dos míticos deportivos como son el Civic Type R (tercer trimestre del año) y el NSX (finales de 2015), a los que hay que sumar el regreso del HR-V, de nuevo como SUV en formato pequeño, junto a la renovación del Jazz (ambos para finales de verano). El CR-V será el protagonista durante el arranque del año, modelo que aún habiendo acabado 2014 como el SUV más vendido en todo el mundo, afronta ahora una segunda juventud actualizando la que ya es su cuarta generación (desde 1997 se han vendido ya más de 7 millones de unidades).
Biturbo de 100 CV litro...
Renault ya anunció 160 CV para su Diesel dCi de 1.6 litros, pero ha sido Honda quien lo ha lanzado primero. Se trata de una evolución del ya conocido motor 1.6 i-DTEC de 120 CV que se mantiene en la gama (exclusivamente ligado a la tracción delantera) y que, gracia a una nuevo módulo de sobrealimentación en dos etapas, aumenta su rendimiento hasta los 160 CV. Adiós 2.2 i-DTEC, porque el pequeño 1.6 biturbo viene a ocupar su lugar anunciando un rendimiento superior y, especialmente, mejores cifras de emisiones y consumos, además de otros beneficios colaterales como un peso inferior sobre el eje delantero. Hecho íntegramente de aluminio, en su pareja de turbos secuenciales se encuentra otra de las primicias entre motores con sobrealimentación semejante, al utilizar como turbo de alta presión (el primero que recibe los gases de escape) una unidad con álabes de geometría variable. Encargado de procurar elasticidad, respuesta inmediata y altas dosis de par desde muy bajas vueltas, se conecta mediante un entramado de tubos a un segundo turbo, ya de geometría fija, que apoya en el soplado al primero a medio régimen para hacerlo en solitario en fases de poca carga de acelerador o a altas vueltas. Sin retraso en la sobrealimentación, tampoco se sienten las fases transitorias en las que sopla uno o dos turbos aunque, eso sí, no es un Diesel al que le gusten el sobrerrégimen. Anuncia sus 160 CV a 4.000 rpm y 35,7 mkg a partir de 2.000 rpm, régimen inusualmente alto para un motor con sus características.
Al igual que el 2.2 i-DTEC, se monta en el CR-V exclusivamente con tracción a las cuatro ruedas. Y es en su transmisión donde encontramos la segunda de las novedades mecánicas, una caja de cambios automática por convertidor de par de 9 velocidades como alternativa al cambio manual de 6. Se trata de un cambio súper compacto, hecho por ZF y conocido ya en Land Rover (Evoque o nuevo Discovery Sport, por ejemplo) aunque con una relación interna totalmente diferente, claramente orientada hacia la economía de consumos. Este conjunto cambio-motor, ya con Stop&Start es 60 kilos más ligero que el anterior 2.2 i-DTEC unido al anterior cambio automático de 5 velocidades (éste sigue presente para la versión de gasolina, que a España sólo llega bajo pedido), rebajando la cifra de consumo desde los 7,4 litros/100 km a los 5,1 de media, apenas dos décimas más que la versión de cambio manual cuando la diferencia era de 0,9 l/100 km anteriormente.
Más beneficios
Mayor velocidad máxima tanto en la versión manual como automática y, en el caso de esta última, también mejor cifra de aceleración. Nuevas juntas con doble espesor en las puertas, moquetas más gruesas y mayor calidad de componentes en el salpicadero (y también tras él) logran que el motor 1.6 i-DTEC, en cualquiera de sus versiones, resulte muy, muy silencioso. En realidad es una de las virtudes inherentes al propulsor en sí. La puesta en escena del i-DTEC de 160 CV es realmente brillante: predisposición inmediata y respuesta siempre enérgica, además de un gran refinamiento y grado de utilización. Pasa por un motor de mayor tamaño.
9 son multitud
El cambio en sí es bastante rápido, pero mover en España, con nuestra orografía y límites de velocidad, un desarrollo final de más de 74 km/h por cada 1.000 revoluciones es un verdadero drama. Tiene, por tanto, no una, sino dos marchas de desahogo a las que sacar partido sólo en condiciones muy, muy favorables aún lo mejor que tiene este motor es su fuerza y progresividad desde bajo régimen. Eso sí, pese a sus también amplios saltos entre marchas cortas, la suave gestión del cambio y una respuesta mecánica sin vacíos contribuyen casi a sentirlo como un monomarcha. 2.200 euros es el sobreprecio a pagar respecto a una versión manual que deja ver de verdad el potencial de este nuevo propulsor.
Más ágil
Dinámicamente, a los beneficios de este nuevo motor se suma una anchura de vías 15 mm superior en los dos ejes, una dirección un 8 por ciento más rápida y un conjunto muelle-amortiguación más firme que antes, mejoras que entre curvas hacen verdaderos milagros, toda vez que se siente al CR-V mucho menos aparatoso conservando la habitual calidad de rodadura. Hay cambios mínimos de diseño aunque desde fuera la imagen es más rotunda y elegante. Dentro, sutiles nuevos detalles junto a la actualización y mejora en los equipos de infoentreteniento y seguridad. De un lado, nuevo sistema Connect con pantalla de 7 pulgadas facilita el manejo de las funciones principales del coche, permite descarga de aplicaciones y admite clonar el smartphone a través de la función mirrorlink. Su evolución, opcional en todas las versiones y de serie en Executive, es una versión con nevegador integrado y cartografía Garmin con actualizaciones gratuitas durante los 5 años de garantía del coche. En seguridad otro primicia más, el i-ACC, un nuevo control de crucero inteligente que, a través de la interacción de la cámara y radar delantero, es capaz de predecir si otros vehículos que circulan en el carril contiguo (sólo el de la derecha) van a situarse delante nuestra. Honda Sensing (exclusivamente para los acabados Executive, por 1.800 euros) se denomina el paquete más completo de seguridad en que, además del citado control de velocidad inteligente, integra el sistema de mantenimiento de carril y el de mitigación de impactos por colisión además de un primer paquete con seis dispositivos (1.300 euros en el los acabados Elegance y Lifestyle), procuran al CR-V un impresionante y eficaz perímetro de seguridad preventiva.
Precios
Honda CR-V 1.6 i-DTEC 120 CV 2WD Comfort manual: 27.500 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC 120 CV 2WD Elegance manual: 30.100 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC 120 CV 2WD Lifestyle manual: 32.100 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC 160 CV 4WD Elegance manual: 34.300 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC 160 CV 4WD Lifestile manual: 36.300 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC160 CV 4WD Executive manual: 38.900 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC160 CV 4WD Elegance automático: 36.500 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC160 CV 4WD Lifestile automático: 38.500 euros
Honda CR-V 1.6 i-DTEC160 CV 4WD Executive automático: 41.100 euros
Honda CR-V 2.0 i V-TEC 155 CV. Bajo pedido: entre 33.100 y 42.100 euros
MARCA |
Honda |
MODELO |
CR-V |
VERSIÓN |
1.6 i-DTEC/120 2WD Manual |
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|
Datos técnicos |
|
Honda CR-V 1.6 i-DTEC Automático |
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MOTOR Y TRANSMISIÓN |
|
Motor |
4 cil. en línea, delantero transversal |
Cilindrada y cotas |
1.597 cm3 - 76,0 x 88,0 mm |
Distribución |
Dos árboles de levas en cabeza. 4 val./cil. |
Alimentación |
Inyección Diesel directa por conducto común, turbo de geometría variable e intercambiador térmico |
Compresión |
16,0:1 |
Potencia máxima |
120 CV CEE a 4.000 rpm |
Par máximo |
30,6 mkg CEE a 2.000 rpm |
Transmisión |
Tracción delantera. Cambio manual de 6 velocidades |
Embrague |
Convertidor de par |
RENDIMIENTOS OFICIALES |
|
Velocidad máx. |
182 km/h |
Acel. 0-100 km/h |
11,2 s |
Consumo urb. / extrurb. / mixto |
4,6 / 4,2 / 4,4 l/100 km |
CO2 |
115 g/km |
MARCA |
Honda |
MODELO |
CR-V |
VERSIÓN |
1.6 i-DTEC/160 4WD Manual |
|
|
Datos técnicos |
|
Honda CR-V 1.6 i-DTEC Automático |
|
MOTOR Y TRANSMISIÓN |
|
Motor |
4 cil. en línea, delantero transversal |
Cilindrada y cotas |
1.597 cm3 - 76,0 x 88,0 mm |
Distribución |
Dos árboles de levas en cabeza. 4 val./cil. |
Alimentación |
Inyección Diesel directa por conducto común, dos turbocompresores (geometría variable - fijo) e intercambiador térmico |
Compresión |
16,0:1 |
Potencia máxima |
160 CV CEE a 4.000 rpm |
Par máximo |
35,71 mkg CEE a 2.000 rpm |
Transmisión |
Tracción total permanente con reparto variable. Cambio manual de 6 velocidades |
Embrague |
Monodisco en seco |
RENDIMIENTOS OFICIALES |
|
Velocidad máx. |
202 km/h |
Acel. 0-100 km/h |
9,6 s |
Consumo urb. / extrurb. / mixto |
5,3 / 4,7 / 4,9 l/100 km |
CO2 |
129 g/km |
MARCA |
Honda |
MODELO |
CR-V |
VERSIÓN |
1.6 i-DTEC/160 4WD Automático |
|
|
Datos técnicos |
|
Honda CR-V 1.6 i-DTEC Automático |
|
MOTOR Y TRANSMISIÓN |
|
Motor |
4 cil. en línea, delantero transversal |
Cilindrada y cotas |
1.597 cm3 - 76,0 x 88,0 mm |
Distribución |
Dos árboles de levas en cabeza. 4 val./cil. |
Alimentación |
Inyección Diesel directa por conducto común, dos turbocompresores (geometría variable - fijo) e intercambiador térmico |
Compresión |
16,0:1 |
Potencia máxima |
160 CV CEE a 4.000 rpm |
Par máximo |
35,71 mkg CEE a 2.000 rpm |
Transmisión |
Tracción total permanente con reparto variable. Cambio automático de 9 relaciones |
Embrague |
Convertidor de par |
RENDIMIENTOS OFICIALES |
|
Velocidad máx. |
197 km/h |
Acel. 0-100 km/h |
10 s |
Consumo urb. / extrurb. / mixto |
5,6 / 4,8 / 5,1 l/100 km |
CO2 |
134 g/km |