Primero lo vimos como coche concepto muy futurista en el Salón de Ginebra de 2017. Y luego, ya este pasado verano, Hyundai nos lo mostró en Corea del Sur con una imagen prácticamente idéntica a la que tendrá el modelo de producción. Si la pregunta es si nos hemos vuelto pitonisos, la respuesta es no: esta semana se han descubierto unidades con y sin camuflaje rodando por el entorno de Hyundai Motor Europe Technical Center, en Alemania, y el parecido es casi exacto.
Mira por tanto las primeras fotos que te dejamos en la galería de este artículo y sabrás cómo es el nuevo SUV de Hyundai, en realidad un modelo que se propulsa por motores eléctricos que, en esta ocasión, reciben la energía a través de unas baterías cargadas por una pila de combustible, alimentada en esta ocasión por hidrógeno. La gran ventaja respecto al coche eléctrico convencional, es el “tiempo de carga” del coche: el que tarde en llenar los tanques de hidrógeno en la estación de servicio.
El concepto no es nuevo en Hyundai. De hecho, se trata de una nueva generación FCEV de la marca, que ya comercializó en muchos mercados previamente un ix35 de pila de combustible, en algunos de ellos denominado Tucson. Esta segunda generación, eso sí, no llegará con la base del nuevo Tucson, sino que se convertirá en un modelo propio que le acompañará en la gama. No hay detalles sobre su plataforma, pero es posible que emplee la nueva desarrollada por ejemplo para el eléctrico Ioniq, un modelo que se venderá como híbrido, híbrido enchufable y EV.
Sin nombre, pero muy eficiente
Lo que tampoco conocemos es el nombre que adoptará este nuevo SUV de Hyundai, aunque a buen seguro que en enero, durante el Consumer Electronics Show (CES) de Las Vegas donde se presentará, se anunciará oficialmente. Mientras tenemos que esperar conformándonos con conocer su imagen y algunos detalles del nuevo modelo ya conocidos y que te detallamos a continuación.
Esta nueva generación de vehículo alimentado por pila de combustible de hidrógeno, promete mucha mayor eficiencia. En concreto, Hyundai anuncia que un 60%, lo que equivaldría a un 9% más de eficiencia que el ix35 FCEV previo. Su potencia equivalente será de unos 163 CV y, según las primeras estimaciones, su autonomía a tanque de hidrógeno lleno será de unos 580 km según el ciclo de homologación japonés, que podría significar según el NEDC europeo aproximadamente 800 km totales: lo que significaría también 100 km más que antes.
Con un frontal con la parrilla trapezoidal de la marca, grupos LED y amplias entradas de aire de refrigeración, sumado a unas líneas muy deportivas donde destacan, por ejemplo, las manetas de apertura de puertas ocultas, este SUV promete una gran aerodinámica y una muy buena respuesta. Placas, electrodos, tanques… todo ha sido mejorado y optimizado en su rendimiento para mejorar también los costes de producción.
Otra de las grandes mejoras que promete Hyundai para su nuevo SUV de hidrógeno es su capacidad y fortaleza de arranque en frío. En concreto, sus ingenieros hablan ya de un óptimo funcionamiento incluso con temperaturas de 30 grados bajo cero, lo que también representaría un gran avance respecto a la generación anterior.
Por dentro, de momento no se ha filtrado ninguna imagen, pero todo hace indicar que será también similar al concepto, destacando un diseño futurista muy moderno presidido siempre por dos grandes pantallas táctiles: la de la instrumentación y la del salpicadero, casi unidas. En apenas mes y medio conoceremos, oficialmente, todos los detalles.
