Este año, el desierto de los Niños ha celebrado su décimo aniversario, con un record de participación: 62 coches y 202 personas, y Autopista ha tenido la oportunidad de vivir la experiencia en primera persona. De la mano de Nacho Salvador y de Fede Granda, los artífices de esta aventura, hemos recorrido 2.400 kilómetros por territorio marroquí, casi la mitad de ellos por pistas y dunas, donde los vehículos de la organización, los Hyundai ix35 y Santa Fe, calzados con neumáticos Michelin Latitude Cross, demostraron su buena capacidad de respuesta en todo tipo de terrenos, gracias a su sistema de tracción y capacidad de bacheo. Recordemos que hace 10 años, en la primera edición del Desierto de los Niños, los coches empleados eran los Hyundai Terracan, auténticos TT con reductora, que con el paso de los años se fueron sustituyendo por los más modernos SUV de la marca. La llegada del Santa Fe marcó un hito, ya que hasta entonces ningún evento de este tipo había utilizado vehículos tipo SUV.
Durante una semana, niños y mayores han recorrido algunos de los parajes más asombrosos de Marruecos, como el bosque de cedros de Arzou, o el Alto Atlas hasta Er Rachidia. Grandes llanuras, lechos de ríos secos con mucha arena y paisaje desértico han sido los protagonistas. También dunas, como las de Erg Chebbi, que hicieron las delicias, sobre todo de conductores. Durante la visita a Ouzina, el Desierto de los Niños puso la primera piedra de la construcción de la fase final del Centro Social, financiado en su totalidad por la Asociación Desierto Niños.
Camión Solidario
Uno de los pilares fundamentales que ha acompañado a esta singular expedición desde su primera edición es el Camión Solidario, que, gracias a la colaboración de Aquarius, entrega el material en escuelas y asociaciones locales, con la ayuda de los niños que componen la caravana del Desierto de los Niños. Con los años esta labor solidaria ha ido creciendo, y si en 2005 se entregaban 2.000 mochilas con material escolar en diferentes colegios, con el paso de los años las entregas son más completas y se hacen sondeando de antemano las necesidades locales.
Además, desde hace 4 años, se unió a la caravana el Hyundai de la Funación Alain Afflelou, un vehículo en el que viajan un grupo de ópticos cuya misión es la de graduar la vista a niños y adultos de las poblaciones más desfavorecidas por las que pasa el viaje. Este año se han llevado a cabo un total de 507 revisiones. El balance: 255 personas necesitan gafas, que se irán entregando próximamente.
Con poco puedes dar mucho
Hace unos años, la organización de El Desierto de los Niños puso en marcha el programa ‘Con muy poco puedes dar mucho’, mediante el cual personas de la organización visitan colegios españoles para explicar en unas charlas cómo son y cómo viven los niños de Marruecos. Después, unos días antes del viaje, vuelven al colegio con el camión que irá a Marruecos para recoger el material que donan los niños de la escuela. El concepto es que cada niño da una cosa, para que vean que juntando el ‘poco’ se convierte en mucho con la colaboración de todos.