Este informe de Fiat recoge los datos de 428.000 trayectos realizados por 5.697 usuarios de cinco países europeos durante 150 días, como parte del proyecto eco:Drive de la firma italiana que busca incentivar y ayudar a lograr una conducción más eficiente.
Así, de entre todos los conductores que han participado en este estudio, los españoles lograron un índice de eficiencia en la conducción de 56,6 sobre una escala de 100. No obstante, Fiat ha indicado que los españoles son los que más rápido aprenden, puesto que experimentaron la mayor mejora registrada en Europa.
La compañía ha asegurado que la conducción ecológica aporta un ahorro significativa de combustible y de emisiones de dióxido de carbono, así como de dinero. Fiat ha explicado que un conductor ecoeficiente logra una reducción media del consumo de combustible es del 5,84 por ciento en un período de treinta días.
El informe pone de manifiesto que las mejoras más importantes en términos de rebaja de consumos se situaron en España, con un 6,01 por ciento y en Reino Unido, con un descenso del 5,71 por ciento, mientras que en Italia se ha experimentado una mejora del 2,63 por ciento.
Ahorro de
El estudio apunta que la conducción eficiente permite ahorrar una media de
En este sentido, el documento pone de manifiesto que a lo largo de la vida útil del automóvil (7 años y medio) el ahorro económico de entre 600 y 1.600 euros en gasto de combustibles. Así, Fiat ha indicado que si todos los conductores europeos utilizaran el 'eco-driving' el combustible ahorrado equivaldría a cinco veces la producción anual de petróleo de la instalación de perforación más grande del mundo.
Las evaluaciones del informe sobre conducción ecológica se enfocan en cuatro áreas diferentes como son: aceleración, desaceleración, cambios de marcha y de velocidad. Los datos reflejan que los conductores logran, de media, los mejores resultados en términos de velocidad y desaceleración, seguidas de cambio de marchas y aceleración.
Fiat ha resaltado que los conductores ecológicos llevan a cabo una conducción más fluida y realizan menos paradas, y ha destacado que si en una ciudad como Madrid se lograse un tráfico más fluido, con un aumento de la velocidad media de