7 cosas que debes saber para no quedarte tirado en carretera este verano

Las sucesivas olas de calor que estamos viviendo están produciendo un aumento de las averías de vehículos en carretera en casi un 60 por ciento, según el RACE. Pero no solo este verano, en lo que va de año las intervenciones suben respecto a 2014. Te contamos todo lo que debes saber para evitar que esto te ocurra.

Alicia Fernández. Twitter: @aliciautopista

7 cosas que debes saber para no quedarte tirado en carretera este verano
7 cosas que debes saber para no quedarte tirado en carretera este verano

La falta de mantenimiento está pasando factura a los conductores. En lo que va de 2015, las asistencias en carretera por averías de los vehículos se han incrementado, de acuerdo con los datos del RACE y la gran ola de calor que vivimos no hace sino agravar la situación. Aunque no sólo son las altas temperaturas, muchas averías se dan en cualquier época del año. Te contamos qué debes tener en cuenta para no verte tirado en carretera con tu coche averiado. La gran mayoría de los problemas se pueden evitar con un pequeño chequeo de seguridad antes de comenzar el viaje.

1.'Hidrata' también al coche. En verano necesitamos beber más líquidos. Pues bien, el coche tal y como nos recomienda Ángel Suárez, Ingeniero del Centro Técnico de Seat, también necesita mantener el nivel de líquidos en estado óptimo. El calor provoca que éstos se evaporen más rápidamente. La operación comienza por comprobar el nivel del refrigerante en el bote de expansión. Es básico para que el motor funcione a la temperatura adecuada.

También comprobaremos que el nivel del aceite sea el correcto. Y que sea el especificado por el fabricante teniendo en cuenta la zona donde vives. No está de más llevar un poco de lubricante extra en el coche. En caso de no hacerlo, si durante el viaje se nos encendiera el testigo del aceite por un nivel demasiado bajo, rellena con otro de igual viscosidad. Si no encuentras, utiliza uno lo más parecido posible: recuerda que es preferible ir con un aceite de diferentes características que no llevar aceite.

2. También el líquido de frenos. Con el tiempo, el líquido de frenos pierde propiedades. No cambiarlo a tiempo puede producir que con el calor pase de estado líquido a gaseoso y los frenos funcionen de forma deficiente. En todo caso una conducción agresiva, y frenadas bruscas y repetidas hará que se calienten más las pastillas por el rozamiento, reduciendo su vida útil y hará que su refrigeración sea más difícil.

3. Pilas cargadas. Sea verano o invierno los problemas con la batería ocupan siempre los primeros lugares entre los motivos de averías. En la mayoría de los casos, su mal estado no influirá durante la circulación del vehículo, pero sí en caso de realizar alguna parada, ya que tal vez no podamos arrancarlo. Normalmente, antes de que una batería deje de funcionar definitivamente suele darnos algún “aviso”. Si compruebas que últimamente te cuesta arrancar el vehículo, prepárate para sustituirla en cualquier momento. Mejor hacerlo antes de viajar ¿no?

4. Ruedas a punto. Sí, eso negro y redondo de lo que los automovilistas nos olvidamos a menudo ocupa siempre un lugar destacado dentro de los motivos de asistencia más comunes. Pinchazos, roturas y reventones. No cuesta nada comprobar la presión de los neumáticos antes de salir de viaje, adaptándola a las necesidades en función de la carga. El calor extremo y una baja presión es el “caldo de cultivo” ideal para sufrir un reventón.

5. Alto motor. La falta de mantenimiento provoca un aumento de averías. En los cinco primeros meses del año de un 5 por ciento. Los motivos son muy variados. Cuando se enciende el testigo de avería del motor puede ser por algo insignificante o algo muy grave. Ante la duda hay que acudir al taller.

6. Atentos al combustible. Aunque las posibilidades de equivocarse a la hora de repostar, echar gasolina en un Diesel o viceversa, son más pequeñas en los últimos tiempos al haberse reducido el boquerel de las mangueras y las bocas de los depósitos, lo cierto es que hasta mayo, el RACE realizó en torno a 1.200 intervenciones por este motivo. Mientras echar gasóleo a un vehículo gasolina resulta complicado por ser la manguera Diesel más ancha, el caso inverso sí puede producirse. Aquí te contamos cómo actuar en cada caso.

7. Limpiaparabrisas a punto. Por último y aunque no es motivo para quedarte tirado pero si puede ser motivo de accidente, unos limpias deficientes no permiten mantener el parabrisas limpio y, si conduces con el sol de frente, podrás tener un susto.