Asistentes de voz en el coche, ¿son peligrosos?

Cada vez más coches integran asistentes de voz para poder contestar mensajes, responder a una llamada o controlar diversas funciones sin necesidad de apartar las manos del volante. Pero, ¿son realmente tan seguros como parecen?

Teresa de Haro. Twitter: @deharito

Asistentes de voz en el coche, ¿son peligrosos?
Asistentes de voz en el coche, ¿son peligrosos?

Una de las últimas campañas de la DGT dejó como resultado un 75 por ciento de denuncias por distracciones debidas al uso manual de dispositivos manuales. Ante la creciente complejidad de los dispositivos de entretenimiento, navegación e información de los coches, los fabricantes están incorporando los sistemas de control por voz, que permiten utilizar muchas de sus funciones de forma oral, manteniendo las manos en el volante. Pero, a pesar de que estos dispositivos se nos presentan como una solución, varios estudios demuestran que su uso supone una de las mayores distracciones mientras conducimos.

 

El Instituto Tecnológico de Massachusetts o MIT, sus siglas en inglés, ha llevado a cabo una investigación que pone de manifiesto que, al contrario de lo que pueda parecer, usar órdenes de voz para llevar a cabo tareas complejas como dictar un mensaje o sintonizar una emisora de radio, lleva más tiempo que hacerlo de forma manual. Además, muchas veces el conductor termina apartando la vista de la carretera para confirmar que el sistema efectivamente ha entendido la orden vocal.

 

Otro de los estudios llevados a cabo en esta línea es el de la Administración Nacional de Seguridad Vial de Estados Unidos. Sus autores pidieron a varios conductores que realizaran tareas al volante que implicaran interactuar con el sistema de control por voz del vehículo, como responder a un mensaje. Cada actividad se valoraba en una escala del 1 (menos distracción) al 5 (dificultades y problemas de memoria). Escuchar la radio fue una de las que menos distracción implicó, al contrario que dictar un mensaje que obtuvo una puntuación del 3.06. Es curioso que hablar por teléfono con las manos en el volante se presentó como más peligrosa que hacerlo con el móvil en la mano.

 

Realizar muchas de estas tareas significa tener en cuenta varios comandos de voz y responder a una lista de opciones, lo que requiere un importante esfuerzo mental. Aquí entran en juego los fabricantes, que deben ir mejorando, simplificando y puliendo los diseños y la interfaz de los asistentes de voz. Es evidente también que los conductores necesitamos un periodo de adaptación a este tipo de sistemas.