Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.
Junto al Mercedes Sportcoupé, es el único compacto de prestigio que se fabrica
exclusivamente en configuración de tres puertas –BMW hace lo contrario en el Serie1 y el resto lo hace indistintamente en tres y cinco puertas-. La carrocería del C30 no es del todo original, rescata líneas que ya vimos en modelos de producción y en prototipos, como el 480 ES, o el SCC, presentado en Detroit en el año 2001. Sin embargo, resulta muy atractiva.Con él, Volvo pretende
facilitar el acceso a la marca con un modelo atractivo que se sitúa como escalón inicial de las gamas, capaz de rejuvenecer la imagen de la firma y capturar clientes jóvenes que no se planteaban la posibilidad de acceder a un Volvo. Quieren que se convierta en un generador de volumen, ya que se producirán 65.000 unidades anuales en la planta belga de Gante.La parte delantera del C30 hereda rasgos muy similares a los conocidos en S40 y el V50, aunque se ha personalizado con algunos
detalles específicos, como los grupos ópticos, que muestran una banda negra en la parte superior, las tomas de aire del radiador, de grandes dimensiones o las formas del paragolpes.El lateral es muy característico, con una
pronunciada forma de cuña, prominentes pasos de rueda, que pueden ir pintados en el color de la carrocería o en combinación con ésta y atractivas llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 205/50 (para las versiones D5 y T5). Las ventanillas traseras son bastante estrechas y remarcan la anchura de los hombros, una característica que limita de alguna forma la anchura útil interior, pero que ha sido subsanada con la eliminación de una plaza posterior.Aún más llamativa la trasera, muy similar a la conocida en el
prototipo de seguridad SCC, con una gran luna que hace las veces de portón y que permite buen acceso al maletero. Su capacidad no es elevada (anuncia 251 litros en las versiones con kit de reparación y 233 litros en las variantes equipadas con rueda de repuesto de emergencia). La marca ha comunicado que en España se venderá con kit de reparación y cortina enrollable de serie, dejando la rueda de emergencia y una bandeja cubreequipaje rígida como opciones).
El volumen que admite de carga no es destacado, aunque tampoco es el propósito del modelo. En cualquier caso, permite llevar cuatro maletas tipo cabina de avión y dispone de unos huecos adicionales bajo el suelo, que en este caso está muy alto, pues las formas del paragolpes posterior obligan a levantar bastante los bultos para ser introducidos en el maletero. En el interior hay más detalles llamativos. Se mantiene la original consola central plana de los Volvo de última hornada, el clásico sistema de salpicadero y relojes Volvo, pero ofrece nuevas posibilidades de personalización interior, como el sistema BLIS, con cámaras laterales para facilitar la seguridad en maniobras de cambio de carril, el sistema ON CALL, que permite establecer comunicación con una operadora durante las 24 horas del día, los 365 días del año, o equipos de sonido de altísima calidad y potencia con sistemas Dolby Surround, Prologic, etc.Pero
el verdadero secreto del C30 se encuentra en las plazas traseras. Los responsables del desarrollo del modelo han preferido recurrir a una arriesgada, pero efectiva solución. Cuatro plazas independientes en dos filas de asientos, con los posteriores sensiblemente centrados para facilitar la visibilidad de los ocupantes de atrás. Disponen de un reposabrazos central abatible y ofrecen suficiente holgura para que se acomoden pasajeros de estatura media, tanto en lo referente a la altura como a la anchura (el espacio para las piernas es la cota más perjudicada). Resulta más difícil el acceso a ellas, ya que las puertas no son muy grandes, existe un nervio de refuerzo en el larguero que limita el espacio de entrada y no resulta rápido el movimiento de los asientos delanteros.