Toyota Corolla Sedán

Toyota comercializará en España a primeros de mayo la décima generación del Corolla, un verdadero modelo global del que se han vendido ya más de 32 millones de unidades. Basado en la plataforma compacta de Toyota, el Corolla Sedán pretende convertirse en un nuevo pilar del segmento C. Línea elegante, motores limpios y económicos y buena capacidad son sus principales argumentos.

Toyota Corolla Sedán
Toyota Corolla Sedán

Ha sido un referente en el mundo del automóvil y prueba de ello es que se han vendido más de 32 millones de unidades en todo el mundo desde su lanzamiento inicial, en el año 1966. Toyota es hoy en día un gigante automovilístico gracias, en buena parte, al Corolla, que se produce en 16 países, se vende en 143 de los cinco continentes y ha generado importantes beneficios a la empresa.La décima generación el Corolla Sedán, que ha mantenido el nombre para continuar la inercia de las anteriores ediciones, es completamente nueva. No obstante, mantiene el ADN de los Corolla anteriores y pretende situarse un escalón por encima del modelo precedente manteniendo el tamaño y precio. Para su diseño no han querido partir de un modelo al que se le añade un tercer volumen, como en la mayoría de los casos, sino que han dibujado directamente la silueta y las proporciones a las que querían llegar. Así, dispone de un frontal específico con el parabrisas inclinado, una parrilla delantera característica y se han plasmado unos pliegues laterales que le dan un toque de elegancia. También la parte trasera, con unas formas clásicas pero distinguidas sitúan al Corolla en un escalón superior.La base elegida para el desarrollo del modelo es la plataforma Toyota del segmento C, es decir, la misma que emplea el Auris, con distancia entre ejes de 2,6 metros. La longitud se ha incrementado en 130 mm respecto a la anterior generación, llegando hasta 4,54 metros, mientras que la anchura lo ha hecho en 50 mm, siendo ahora de 1,76 m. Por su parte la altura se mantiene en los mismos valores de antes, con 1,47m y las vías aumentan en 45 y 50 mm respectivamente. Estas cifras no se traducen en unas dimensiones interiores muy destacables, excepto en el maletero, que con 450 litros (13 más que el anterior -medición VDA-) se sitúa entre los más amplios de la categoría. Incluso podría ser algo más grande, pues lleva rueda de repuesto de emergencia en todos los casos y no ocupa todo el hueco preparado al efecto. Además, si se necesita más capacidad, puede lograrse un espacio adicional abatiendo los respaldos posteriores en proporción 40/60.Las plazas delanteras son amplias y cómodas, con suficiente anchura, mientras que las traseras están bien para dos ocupantes, no para tres, pues la anchura interior no destaca por encima de la media.La terminación interior es correcta, muy similar a la del Auris, con el que comparte el cuadro de instrumentos y otros elementos. Además, el ajuste de las piezas es muy bueno y la sensación de calidad destaca en general. Nos ha gustado bastante la cantidad de detalles y la practicidad interior, con huecos cajones y bandejas preparados para dejar objetos pequeños: dos guanteras en el lado del acompañante, en la consola central, en las puertas, en el techo o en los reposabrazos centrales delantero y trasero.Ha sido un referente en el mundo del automóvil y prueba de ello es que se han vendido más de 32 millones de unidades en todo el mundo desde su lanzamiento inicial, en el año 1966. Toyota es hoy en día un gigante automovilístico gracias, en buena parte, al Corolla, que se produce en 16 países, se vende en 143 de los cinco continentes y ha generado importantes beneficios a la empresa.La décima generación el Corolla Sedán, que ha mantenido el nombre para continuar la inercia de las anteriores ediciones, es completamente nueva. No obstante, mantiene el ADN de los Corolla anteriores y pretende situarse un escalón por encima del modelo precedente manteniendo el tamaño y precio. Para su diseño no han querido partir de un modelo al que se le añade un tercer volumen, como en la mayoría de los casos, sino que han dibujado directamente la silueta y las proporciones a las que querían llegar. Así, dispone de un frontal específico con el parabrisas inclinado, una parrilla delantera característica y se han plasmado unos pliegues laterales que le dan un toque de elegancia. También la parte trasera, con unas formas clásicas pero distinguidas sitúan al Corolla en un escalón superior.La base elegida para el desarrollo del modelo es la plataforma Toyota del segmento C, es decir, la misma que emplea el Auris, con distancia entre ejes de 2,6 metros. La longitud se ha incrementado en 130 mm respecto a la anterior generación, llegando hasta 4,54 metros, mientras que la anchura lo ha hecho en 50 mm, siendo ahora de 1,76 m. Por su parte la altura se mantiene en los mismos valores de antes, con 1,47m y las vías aumentan en 45 y 50 mm respectivamente. Estas cifras no se traducen en unas dimensiones interiores muy destacables, excepto en el maletero, que con 450 litros (13 más que el anterior -medición VDA-) se sitúa entre los más amplios de la categoría. Incluso podría ser algo más grande, pues lleva rueda de repuesto de emergencia en todos los casos y no ocupa todo el hueco preparado al efecto. Además, si se necesita más capacidad, puede lograrse un espacio adicional abatiendo los respaldos posteriores en proporción 40/60.Las plazas delanteras son amplias y cómodas, con suficiente anchura, mientras que las traseras están bien para dos ocupantes, no para tres, pues la anchura interior no destaca por encima de la media.La terminación interior es correcta, muy similar a la del Auris, con el que comparte el cuadro de instrumentos y otros elementos. Además, el ajuste de las piezas es muy bueno y la sensación de calidad destaca en general. Nos ha gustado bastante la cantidad de detalles y la practicidad interior, con huecos cajones y bandejas preparados para dejar objetos pequeños: dos guanteras en el lado del acompañante, en la consola central, en las puertas, en el techo o en los reposabrazos centrales delantero y trasero.Ha sido un referente en el mundo del automóvil y prueba de ello es que se han vendido más de 32 millones de unidades en todo el mundo desde su lanzamiento inicial, en el año 1966. Toyota es hoy en día un gigante automovilístico gracias, en buena parte, al Corolla, que se produce en 16 países, se vende en 143 de los cinco continentes y ha generado importantes beneficios a la empresa.La décima generación el Corolla Sedán, que ha mantenido el nombre para continuar la inercia de las anteriores ediciones, es completamente nueva. No obstante, mantiene el ADN de los Corolla anteriores y pretende situarse un escalón por encima del modelo precedente manteniendo el tamaño y precio. Para su diseño no han querido partir de un modelo al que se le añade un tercer volumen, como en la mayoría de los casos, sino que han dibujado directamente la silueta y las proporciones a las que querían llegar. Así, dispone de un frontal específico con el parabrisas inclinado, una parrilla delantera característica y se han plasmado unos pliegues laterales que le dan un toque de elegancia. También la parte trasera, con unas formas clásicas pero distinguidas sitúan al Corolla en un escalón superior.La base elegida para el desarrollo del modelo es la plataforma Toyota del segmento C, es decir, la misma que emplea el Auris, con distancia entre ejes de 2,6 metros. La longitud se ha incrementado en 130 mm respecto a la anterior generación, llegando hasta 4,54 metros, mientras que la anchura lo ha hecho en 50 mm, siendo ahora de 1,76 m. Por su parte la altura se mantiene en los mismos valores de antes, con 1,47m y las vías aumentan en 45 y 50 mm respectivamente. Estas cifras no se traducen en unas dimensiones interiores muy destacables, excepto en el maletero, que con 450 litros (13 más que el anterior -medición VDA-) se sitúa entre los más amplios de la categoría. Incluso podría ser algo más grande, pues lleva rueda de repuesto de emergencia en todos los casos y no ocupa todo el hueco preparado al efecto. Además, si se necesita más capacidad, puede lograrse un espacio adicional abatiendo los respaldos posteriores en proporción 40/60.Las plazas delanteras son amplias y cómodas, con suficiente anchura, mientras que las traseras están bien para dos ocupantes, no para tres, pues la anchura interior no destaca por encima de la media.La terminación interior es correcta, muy similar a la del Auris, con el que comparte el cuadro de instrumentos y otros elementos. Además, el ajuste de las piezas es muy bueno y la sensación de calidad destaca en general. Nos ha gustado bastante la cantidad de detalles y la practicidad interior, con huecos cajones y bandejas preparados para dejar objetos pequeños: dos guanteras en el lado del acompañante, en la consola central, en las puertas, en el techo o en los reposabrazos centrales delantero y trasero.Ha sido un referente en el mundo del automóvil y prueba de ello es que se han vendido más de 32 millones de unidades en todo el mundo desde su lanzamiento inicial, en el año 1966. Toyota es hoy en día un gigante automovilístico gracias, en buena parte, al Corolla, que se produce en 16 países, se vende en 143 de los cinco continentes y ha generado importantes beneficios a la empresa.La décima generación el Corolla Sedán, que ha mantenido el nombre para continuar la inercia de las anteriores ediciones, es completamente nueva. No obstante, mantiene el ADN de los Corolla anteriores y pretende situarse un escalón por encima del modelo precedente manteniendo el tamaño y precio. Para su diseño no han querido partir de un modelo al que se le añade un tercer volumen, como en la mayoría de los casos, sino que han dibujado directamente la silueta y las proporciones a las que querían llegar. Así, dispone de un frontal específico con el parabrisas inclinado, una parrilla delantera característica y se han plasmado unos pliegues laterales que le dan un toque de elegancia. También la parte trasera, con unas formas clásicas pero distinguidas sitúan al Corolla en un escalón superior.La base elegida para el desarrollo del modelo es la plataforma Toyota del segmento C, es decir, la misma que emplea el Auris, con distancia entre ejes de 2,6 metros. La longitud se ha incrementado en 130 mm respecto a la anterior generación, llegando hasta 4,54 metros, mientras que la anchura lo ha hecho en 50 mm, siendo ahora de 1,76 m. Por su parte la altura se mantiene en los mismos valores de antes, con 1,47m y las vías aumentan en 45 y 50 mm respectivamente. Estas cifras no se traducen en unas dimensiones interiores muy destacables, excepto en el maletero, que con 450 litros (13 más que el anterior -medición VDA-) se sitúa entre los más amplios de la categoría. Incluso podría ser algo más grande, pues lleva rueda de repuesto de emergencia en todos los casos y no ocupa todo el hueco preparado al efecto. Además, si se necesita más capacidad, puede lograrse un espacio adicional abatiendo los respaldos posteriores en proporción 40/60.Las plazas delanteras son amplias y cómodas, con suficiente anchura, mientras que las traseras están bien para dos ocupantes, no para tres, pues la anchura interior no destaca por encima de la media.La terminación interior es correcta, muy similar a la del Auris, con el que comparte el cuadro de instrumentos y otros elementos. Además, el ajuste de las piezas es muy bueno y la sensación de calidad destaca en general. Nos ha gustado bastante la cantidad de detalles y la practicidad interior, con huecos cajones y bandejas preparados para dejar objetos pequeños: dos guanteras en el lado del acompañante, en la consola central, en las puertas, en el techo o en los reposabrazos centrales delantero y trasero.