La alianza entre Mercedes y Renault ha hecho posible que Smart se haya planteado sacar a la venta un nuevo Forfour. Comparte tecnología, estética y mecánicas con el Renault Twingo, además de con su 'versión' de batalla corta Fortwo. Nada tiene que ver con la primera generación, salvo su filosofía. Sigue siendo un utilitario de cinco puertas y cuatro plazas, que aporta las posibilidades de configuración estética habituales en Smart siendo, en resumen, la versión más práctica del popular Fortwo.
En esta nueva generación se ha buscado hacer un coche todavía más práctico que antes, dotándole de diferentes soluciones de configuración en su interior. Es más ancho que la generación previa y su longitud se ha establecido en los 3,5 metros. Mantiene la capacidad de cuatro ocupantes, con asientos independientes en las plazas traseras. Las puertas se pueden abrir hasta casi 90 grados, lo que resulta muy útil para introducir a los niños en sus sillas infantiles. Las banquetas traseras se convierten en un buen lugar para albergar objetos grandes con un solo movimiento, sin necesidad de tocar los respaldos traseros, que también son abatibles. Éstos pueden tumbarse por completo o avanzar solo unos grados para aumentar la capacidad de carga sin anular las plazas traseras; queda un asiento más incómodo pero para un trayecto corto es válido. De serie, el respaldo del acompañante delantero se puede tumbar para transportar objetos largos.
Además del techo convencional ofrece la posibilidad de un techo panorámico o de otro de lona abatible eléctricamente; no es un cabrio pero con esta opción se acerca bastante. Su carrocería bicolor cuenta hasta con 40 combinaciones distintas de colores de carrocería e interiores. En España se vende con tres niveles de acabado, además del personalizable Tailor Made. Tiene dos motores de gasolina de tres cilindros, que como en el Fortwo también llevan Stop/Start. Van dispuestos bajo el fondo del maletero y le otorgan la propulsión trasera. De origen Renault-Mercedes, el primero es atmosférico, cuenta con 1 litro de cilindrada y ofrece 71 caballos. El segundo baja la cilindrada y añade turbo, con lo que llega a los 91 caballos. En ambos se puede optar ahora por el recomendable cambio DCT, de seis velocidades y doble embrague que añade un confort de marcha muy superior al del anterior cambio automatizado.
En esta generación se ha ganado confort, tanto en el habitáculo como en el comportamiento. Es un coche que se comporta bien, apostando por la seguridad antes que por la diversión. Pesa poco y tiene un buen reparto de peso, por lo que en carretera ofrece un buen nivel con independencia del motor que lleve. En ciudad resulta ágil entre el tráfico y ofrece un excelente radio de giro. Añade sistemas de ayudas a la conducción, como la alerta de salida de carril, el control de estabilidad con función de asistencia con viento lateral o sensor de distancia, y mejora en opciones de info-entretenimiento. Está a la venta desde el 20 de noviembre por 12.500 euros con 71 CV y 13.800 euros en la versión de 90 caballos.
