Las siglas GTS siempre han significado algo especial para los amantes de la marca Porsche. El primero en utilizarlas fue el 904 Carrera GTS de 1963, prácticamente un coche de carreras homologado para circular por la calle. Posteriormente han servido para denominar ciertas versiones muy apreciadas hoy día por los coleccionistas, bien emparentadas con el mundo de la competición, o bien dotadas de soluciones técnicas enfocadas a lograr una mayor deportividad. Algunos ejemplos son los 924, 928 y 911 GTS; y más recientemente, Boxster y Cayman, cuyo nombre va precedido de la denominación 718 en la actual generación.
Dentro de la gama Porsche 718, los GTS quedan justo por encima de los S, manteniendo su motor de 4 cilindros horizontales opuestos, los 2,5 litros de cilindrada y el turbo de geometría variable (geometría fija y 2 litros de cilindrada en los 718 convencionales). Sin embargo, en los GTS la presión de soplado pasa de 1,1 a 1,3 bar, además recibe optimizaciones en el sistema de admisión, con lo que aumenta su potencia 15 CV (365 CV). La suspensión, que de serie es de tipo PASM con amortiguadores adaptativos, está rebajada en 10 milímetros respecto a los Porsche 718 S. También monta escape deportivo, que realza el sonido y amplifica los petardeos al levantar el pie derecho tras fuertes aceleraciones, así como en las reducciones.
Motor y cambio PDK de 7 marchas logran una simbiosis perfecta en los Porsche 718 GTS, tanto por el brillante funcionamiento de esta caja de doble embrague, como por los bien escogidos desarrollos. Respecto al manual de 6 relaciones, el PDK homologa menos consumo y reduce el tramo impositivo por emisiones de CO2, por lo que la diferencia de precio es despreciable. Además, el motor cuenta con 430 Nm de par en lugar de los 420 Nm del manual y el paso de 0 a 100 km/h es significativamente mejor, 4,1 segundos (con "launch control" y modo Sport ), frente a 4,6 del manual.
Su motor
El equipamiento de los Porsche 718 Boxster y Cayman GTS es muy completo y se puede incrementar con paquetes exclusivos para esta versión, que estéticamente se diferencia por las llantas de color negro, los grupos ópticos oscurecidos y otros detalles en negro. En el interior, destacan los asientos deportivos tapizados en Alcantara, material que también recubre el volante, el pomo del cambio y, en el caso del Cayman, el techo. A su vez, el sistema de infoentretenimiento es compatible con una aplicación de telemetría para el teléfono móvil (Porsche Track Precision), idónea para analizar nuestras evoluciones en circuito, un terreno donde los Porsche 718 GTS no desentonan en absoluto.
En marcha
En el trazado de Ascari, donde transcurría la presentación del 718 Cayman GTS, se alcanzaba un ritmo muy respetable para un coche de serie, siempre con una gran precisión en los apoyos, un impecable equilibrio y buena sensibilidad del tren trasero a las transferencias de masas.Tanto el paso por curva como la capacidad de tracción resultan sobresalientes, con un autoblocante mecánico controlado electrónicamente y las poco o nada intrusivas ayudas electrónicas en modo Sport para aportar eficacia. La frenada es contundente y sin degradarse con el trato duro, gracias a los discos cerámicos opcionalesde nuestra unidad.
Fuera del circuito también puede alcanzar ritmos de vértigo sin apenas inmutarse, con una naturalidad pasmosa y sin importar que el asfalto esté algo deteriorado. Esta vez, a bordo del 718 Boxster GTS y por las deslizantes carreteras de la serranía de Ronda, nos encontramos ante un modelo de lo más utilizable, cómodo de suspensiones a pesar de su mayor firmeza y, al mismo tiempo, capaz de satisfacer cualquier exigencia deportiva, pues el eje trasero no duda en redondear los giros a poco que se presente una buena ocasión, sobre todo con la humedad de la mañana.
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