El Honda HR-V de 2019 ha ganado en refinamiento, en insonorización, en conectividad y ayudas a la conducción. Pero, además, sobre todo, ha desarrollado una variante sobrealimentada, de 182 CV, que se convierte en el estandarte de ese aura de marca de alta ingeniería que tiene Honda. Es una variante con una única versión comercial cuyo nombre, Sport, ya anuncia lo que se puede esperar: deportividad sin una radicalidad extrema ni en lo visual ni en su comportamiento. De ahí, sus menos de 8 segundos para acelerar hasta los 100 km/h y sus 215 km/h de velocidad máxima que complementan a las versiones impulsadas por el motor atmosférico de gasolina 1.5 y 130 CV, disponibles con cambio automático CVT en opción. La mala noticia para los aficionados al Diesel es que, como sucedía ya de facto desde finales de 2018, no se contempla la comercialización de las variantes 1.6 i-DTEC.
El motor y chasis del Honda HR-V Sport 2019
Este nuevo Honda HR-V Sport no sólo se sitúa en lo alto de la pirámide por incorporar el motor 1.5 VTEC turbo de 182 que estrenase el Civic, un pequeño prodigio que con la ayuda del turbo con alzada y tiempo de apertura de las válvulas variable que permite tanto circular a bajo régimen como sentir la fuerza camino de las 6.000 rpm, sino que también incluye completa adaptación del chasis en suspensión y dirección que consiguen hacerle más preciso, ágil y grato de conducir cuando aumenta el nivel de exigencia o empeoran las condiciones de la carretera. Se complementa con un cambio manual de seis relaciones con un preciso selector de recorridos cortos o el renovado CVT que estrenase el CIvic. Éste incorpora ahora una serie de posiciones fijas en el variador que permiten un control más personal de su funcionamiento en retención y un sistema que al cortar gas mantendría el régimen de giro del motor para ofrecer retención de motor que aumentase el control del vehículo en zonas viradas.
La exigencia que el nuevo motor del Honda HR-V somete al chasis ha llevado a los especialistas de Honda a introducir modificaciones en el chasis que aseguren tanto el control lineal como la precisión en curvas, especialmente cuando el firme no es del todo regular. Así, además de contar con la amortiguación SDC introducida en 2015 —un amortiguador con una válvula interior que permiten aumentar su respuesta modificando la fuerza de la amortiguación según el tipo de conducción y condiciones de la carretera—, las versiones Sport del HR-V han pasado a montar el llamado Performance Damper. Se trata de un sistema de amortiguación colocado tras los paragolpes tanto en el eje anterior como el posterior, que ayuda a contrarrestar el desplazamiento lateral, especialmente cuando aparecen baches y el coche está apoyado trazando una curva o cuando se pretende hacer un cambio de carril rápido, además de reducir las vibraciones en carreteras de firme irregular. Interactúa facilitando la sensación de precisión de la dirección, que en esta versión incluye un sistema eléctrico de desmultiplicación variable que se adaptaría a la velocidad favoreciendo su manejabilidad o aumentando el control a alta velocidad.
Los sistemas de seguridad y conectividad del Honda HR-V
El Honda HR-V de 2019 ha sido revisado para incorporar parte de la batería de ayudas a la conducción que empiezan a poblar incluso la categoría de los SUV más pequeños. Así, ha incorporado el sistema cambio automático de luces largas y cortas —de led en la versión Sport—, el reconocimiento de señales de tráfico de velocidad, una avisador de riesgo de colisión y un limitador inteligente de velocidad capaz de adaptar la velocidad a los valores legales ajustando la potencia del motor: reduciéndola para mantenerse en la legalidad cuando apareciese un límite inferior y aumentándola cuando se volviese a uno más alto. No se contemplan, sin embargo la ayuda activa que impediría el cambio involuntario de carril o el reconocimiento de peatones y ciclistas, aunque sí el frenado autónomo en ciudad. Éste, por debajo de 32 km/h podría llegar a detener el vehículo tras haber detectado el sensor láser la presencia de un obstáculo.
Al margen de esto, el Honda HR-V de 2019 cuenta con la conectividad Honda Connect que da acceso a diversas app, lleva precargada la aplicación AHA y en su pantalla táctil de 7" podría reproducir la pantalla de smartphones tanto de los entornos Android como Apple.
Como podía suponerse, en el proceso de actualización del HR-V no se han perdido los Magic Seats traseros que permitirían bien abatir el respaldo del asiento hasta formar una superficie plana de 1,84 m enrasada con el maletero o bien bascular la banqueta, al estilo de lo que sucede en los cines, facilitando un espacio de carga de más de 1,2 m de alto tras los asientos delanteros. En cambio, sí han mejorado la insonorización —aspecto en el que se encuadran nuevos revestimientos y sistemas canceladores de ruido a través del equipo de audio— y la comodidad, especialmente en las versiones Sport que estrenan una tapicería mixta tela cuero fresca y confortable para pasar varias horas a bordo sin variar la posición.
