¿El compacto más seguro? Test en pista: Mazda 3, Astra, León, Mégane, Focus, Corolla, Ceed e i30

Si creías que ya te habíamos contado todo de nuestra supercomparativa de compactos, que puedes volver a leer aquí y de la que ya te dimos incluso hasta un ganador global, te equivocas. Dejábamos para el final uno de los apartados más difíciles de valorar y que no siempre podemos llevar a la práctica: la seguridad. Esta vez, sometemos a nuestros 8 protagonistas a tres ejercicios diferentes en nuestra pista de pruebas del INTA (Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial): test de frenada asimétrica, test del alce y el eslalon.

Frente a frente, por tanto, situamos a Ford Focus, Hyundai i30, Kia Ceed, Mazda 3, Opel Astra, Renault Mégane, Seat León y Toyota Corolla. Aunque no sea aquí definitorio, te recordamos también que todos ellos cuentan con motores de gasolina de entre 122 y 140 CV (con la excepción del sistema híbrido del Corolla) y de nuevo que, en la búsqueda del mejor compacto generalista del momento, sólo se han quedado fuera el Peugeot 308 PureTech (cuya versión con filtro de partículas aún no había llegado en el momento de la prueba) y el VW Golf TSI (que ya lo introdujimos meses antes en la supercomparativa de compactos premium). ¡Arrancamos!

La seguridad, por encima de todo: entrando en pista…

Antes de entrar de lleno en los ejercicios y en la valoración de cada uno de ellos, te damos unas primeras impresiones. Algo que hemos podido sacar en claro es, sin duda, el buen nivel de seguridad activa que ofrece este segmento hoy en día. Incluso llevando a cada uno a sus límites en nuestro circuito del INTA, que simula una carretera revirada, las reacciones de todos han sido satisfactorias, primando la facilidad de conducción en todo momento.

En la mayoría de los casos su control de estabilidad, o ESP, actúa de modo preventivo, sin dejarnos llegar a situaciones críticas en las que no haya vuelta atrás, y pensando en conductores de todos los niveles. También es cierto que nos hemos encontrado con coches cuyas especificaciones de neumáticos superan de largo una pretendida orientación deportiva de coches como Ford Focus o Seat León, curiosamente, los que mejor han resuelto los ejercicios.

Frenada asimétrica: el ganador, el Ford Focus

Empezamos por nuestro ejercicio de frenada asimétrica, cuya pista específica está formada por una superficie de basalto pulido que, al mojarse, resulta casi tan deslizante como el hielo. Para realizar la frenada hay que situar dos ruedas sobre el asfalto y otras dos en la mencionada pista, algo que obliga a las ayudas electrónicas a emplearse a fondo para lograr mantener la estabilidad.

Esta prueba se realiza por tanto frenando sobre firmes de muy distinta adherencia en ambos lados. Y en ella, el Ford Focus 1.0 EcoBoost de 125 CV destaca claramente de sus rivales, con reacciones impecables sin necesidad de corrección. En el podio le acompañan Seat León 1.5 EcoTSI de 130 CV y Opel Astra 1.4 Turbo de 125 CV, con idénticas maneras pero una distancia más cercana ya a los 60 metros. A continuación, el Toyota Corolla 125H e-CVT ocupa el 4º lugar, pero, a pesar de emplear unos razonables 61,2 metros en detenerse, presenta el comportamiento más delicado de todos.

Ya en 5ª y 6ª posición figuran el Hyundai i30 1.4 T-GDI de 140 CV y el Renault Mégane 1.33 TCE de 140 CV, que se caracterizan por primar en ellos una reacción noble. El Kia Ceed 1.4 T-GDI de 140 CV, con una distancia superior a su “hermano" i30, se ve perjudicado por una peor gestión electrónica del control de estabilidad. Y en último lugar encontramos al Mazda 3 Skyactiv-G de 122 CV, que a pesar de frenar de manera lineal, emplea la mayor de las distancias en gran medida debido a los neumáticos Toyo Proxes.

Test del alce: el ganador, el Ford Focus

Como siempre, complicado y delicado el ejercicio en esta ocasión del test del alce. De primeras hemos de decir que todos y cada uno de nuestros protagonistas realizan el ejercicio de manera más que satisfactoria. Pero el Ford Focus destaca sobre manera por diferentes motivos: por un chasis impecable a pesar de no contar con la elaborada suspensión mulitbrazo de generaciones anteriores; y por unos neumáticos "top" que redondean un conjunto que en este ejercicio se muestra imbatible, con una velocidad de entrada altísima.

Como dato curioso, en el Seat León, que lleva suspensión pilotada, el mejor dato se ha conseguido en modo Normal, ya que en Sport la suspensión rebota y empeora el resultado. El Opel Astra, por su parte, es el primero de los "mortales" que no montan rueda deportiva. Este ejercicio pone en entredicho a los que montan los costosos esquemas multibrazos traseros. Por supuesto, la calidad del neumático también tiene mucho que ver.

Eslalon: el ganador, el Ford Focus

Nos metemos, por último, en la prueba del eslalon, sin duda la que mejor mide la agilidad y la eficacia dinámica de un coche. Y, aquí, tanto Ford Focus como Seat León hacen registros de deportivo y sobresalen con respecto a los competidores de esta comparativa. Ambos modelos tienen reacciones muy similares (excepcionales), siendo el León más fácil de conducir. Bien es verdad que el neumático, como no nos cansamos de repetir, juega un papel determinante, y en eso sus seis adversarios fallan en mayor o en menor medida por una monta de gomas con especificaciones menos deportivas.

Es por ello que el Mazda 3, y sus Toyo, se quedan algo descolgados porque el coche reacciona en líneas generales muy bien. Excelente progreso en materia de puesta a punto del ESP en todos ellos, apenas entra en acción, aunque en paralelo también han avanzado sobremanera unos bastidores pata negra.