La segunda generación del BMW Serie Active 2 Tourer ya se comercializa en España desde 36.900 euros. Transcurridos unos años de la primera generación, parecía que quizás BMW descontinuase este tipo de carrocería porque ahora lo que se lleva y se vende son los SUV. Pero no solo es que BMW lleve vendidas casi 450.000 unidades del primer 2 Active Tourer (que en España han sido más de 15.600 unidades), es que la nueva entrega no solo ha crecido en tamaño sino que además adquiere un nivel de tecnología superior y similar al que tiene el iX. Ahora pasa de ser, al menos en enfoque mercadotécnico, de monovolumen a “una estética sofisticada en un moderno perfil de carácter crossover”...
Vale, aunque el mercado de los SUV casi alcanza un 60 por ciento de las ventas, todavía existen algunos monovolumenes en el mercado que se resisten a salir de nuestras vidas. No todo el mundo quiere un SUV o un Crossover, no sucumbe directamente a esas modas, y es más que feliz con un coche fácil de acceder y amplio por dentro. O sea, una de estas carrocerías como este nuevo BMW Serie 2 Active Tourer.
BMW Serie 2 Active Tourer: Más afilado, más capaz y más aerodinámico
Está claro que el nuevo BMW Serie 2 Active Tourer ha cambiado. Ahora es fácil ver una carrocería más afilada, con un pilar A más inclinado. Tanto, aunque sin perjudicar la habitabilidad interior de ninguna forma, que en conjunto BMW anuncia una cifra de Cx de 0,26 para su coeficiente aerodinámico. Delante también es fácil discriminar como los “riñones” típicos de la imagen de la marca han crecido mucho, casi talla XXL diríamos, que además regulan el sistema de apertura o cierre de los pasos de aire según haya que calentar o refrigerar el motor. Se aprovecha eso sí, también para albergar los distintos sistemas de radares y sensores para la ayuda a la conducción y demás.
Como toda la carrocería es nueva, también lo son todos los elementos, como los dos colores de pintura sin metalizar y los nueve metalizados que ofrece la gama, y hasta las manetas de las puertas, enrasadas y que se hacen notar en el diseño. Ahora de serie cuenta con faros full-LED, que pueden ser adaptativos previo desembolso adicional.
Las llantas pueden ser de 16 o 17 pulgadas y, nuevamente tirando de billetera, de hasta 19 pulgadas. La salida del escape casi no se ve porque está camuflada en el faldón trasero. Además, como otra de las opciones disponibles entre las muchas que ofrece, está el paquete M Sport o el acabado Luxury Line. Es verdad que aunque el Serie 2 Active Tourer no es un modelo deportivo, y es el menos BMW menos deportivo si se quiere ver así según los estándares que siempre se le atribuyen a la marca por su tradicional tracción trasera que aquí no se da, el aplomo en su conducción y la calidad de rodadura típicas de BMW afloran enseguida. Incluso se nota casi sin llegar a conducirlo.
Con la suspensión M Sport, el chasis es más rígido porque la suspensiones se endurecen un poco y además la altura libre al suelo es 15 mm menor. De esa forma, la conducción se hace todavía más estable, pero ahí queda para los que además de un vehículo familiar quieran contar con un comportamiento más deportivo.
Las cotas exteriores han crecido y por eso el BMW Serie 2 Active Tourer es más grande por fuera y más capaz por dentro. También hay que añadir que ofrece mayor funcionalidad, ahora lo vemos. Exteriormente hay que tener en cuenta que son 4,386 metros de longitud, con una anchura de 1,824 y una altura de 1,576 metros. La distancia entre ejes es ahora de 2,670 metros. Dentro se cabe muy bien, lo mismo delante que detrás. Entran cinco personas y precisamente en las plazas posteriores se ha ganado distancia para las piernas.
La modularidad también es un aspecto a tener en cuenta porque precisamente el asiento trasero, además de poderse abatir para llegar hasta casi los 1.500 litros de capacidad máxima, puede deslizarse linealmente 13 centímetros para jugar con ese espacio de maletero o piernas. Precisamente la capacidad de maletero se se sitúa en un mínimo de 415 litros para las versión híbrida por la batería que resta espacio, o 470 litros para las que no son híbridas.
BMW Curved Display o las pantallas orientadas al conductor del salpicadero
Inspiradas en las del BMW iX, las dos pantallas que presiden el salpicadero del 2 Active Tourer son, sin duda, el elemento que más llama la atención en el interior de este espacioso vehículo. Son dos pantallas digitales, aunque parezcan una sola. La del cuadro de relojes es de 10,25 pulgadas, y la del centro de 10,7. O sea, poco más de 20 pulgadas de tamaño en total. Como está ligeramente curvada y orientada al conductor, se llama BMW Curved Display. Entre otras cosas, disponen también del sistema operativo más moderno de la marca, el ID8. El resultado no solo son pantallas que se ven con una nitidez excelente, es que ofrecen un montonazo de datos y opciones y su software es muy rápido.
De esa forma también se reduce el número de botones para otras funciones. Tanto que casi no hay ninguno para las típicas funciones de la climatización, etc. Bueno, para mí, prefiero que ciertas funcionalidades, como las citadas, sean por botones y de buen tamaño, pero en esto hay siempre diversidad de opiniones. Dicho sistema operativo incluye control por voz para dar ordenes varias al coche y que no haga falta toquetear nada ni desviar la vista de la conducción. Encima es capaz de quedarse con algunos de nuestros hábitos de conducción para reproducirlo en esos momentos y que no nos tengamos que preocupar por nada, siempre a nuestra elección.
Es de destacar también el navegador. Primero porque cuenta con realidad aumentada, muy útil cuando nos acercamos al desvío o cruce y representa en tiempo real simulada la visión de cámara pero agrandada para ver el mejor el detalle de un cruce, un cambio de carril, etc. La cartografía del sistema (BMW Maps) se aloja en la nube y recibe actualización en remoto.
Así, con esa vista tan tecnológica de las pantallas, los materiales de acabado y de tapicería de excelente cuño, y la consola central flotante donde está el selector del cambio, ofrece un interior que por su comentada amplitud, es agradable y de lujo.
Se comercializa desde 36.900 euros y con una mecánica diésel, otra de gasolina y una tercera híbrida
Desde este mismo mes de febrero ya se comercializa este nuevo BMW Serie 2 Active Tourer. Hay tres versiones en cuanto a motorización se refiere, todas ellas con la transmisión Steptronic de doble embrague de 7 relaciones y tracción delantera. Una es diésel, otra de gasolina, y la última es híbrida ligera de 48 voltios. En junio se agregarán a esta lista dos híbridas enchufables, 225e xDrive con 245 caballos y 230e xDrive con 326, de tracción total porque el motor térmico mueve las ruedas delanteras y el eléctrico las traseras, pero sin árbol de transmisión que una ambos propulsores. Cuando salgan al mercado, aportarán también 35 kilómetros más de autonomía en funcionamiento eléctrico que antes por el aumento de capacidad de sus baterías, con un total de 90 kilómetros. Etiqueta ECO al canto por tanto.
Lejos de huir de las mecánicas diésel, BMW ofrece el conocido bloque de cuatro cilindros y 2.0 litros de cilindrada con 150 caballos. Es el 2 Active Tourer 218d que, en la práctica, incluso es el motor más agradable de conducir por su capacidad de entrega de potencia y sin ser el más potente de la gama. También es la versión con menor consumo de combustible homologado, 4,8 l/100 km.
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Si pasamos a la gasolina, las versiones son las 218i y 220i, que cuentan con el motor de tres cilindros y 1,5 litros de cilindrada. En el primer caso la potencia es de 136 caballos y un par de 230 Nm con un consumo combinado homologado de 6,2 l/100 km y que se conduce con suavidad y es voluntarioso. En el segundo caso nos vamos hasta los 170 caballos con una hibridación ligera de 48 voltios. Tiene por tanto un motor eléctrico, ahora de 19 caballos, que complementa en potencia al térmico en aceleraciones, etc. Se nota un funcionamiento más lineal y se aprecia claramente su mayor potencia y cifra de par (280 Nm) a la hora de apretar al acelerador y acelerar o recuperar. Homologa un consumo combinado de 5,9 litros cada 100 kilómetros recorridos. Es también el de mayor costo de adquisición de la gama.
Precios de la gama BMW Serie 2 Active Tourer (en euros)
- 218i 36.900 euros
- 218d 37.700 euros
- 220i 39.900 euros
