Fa-Gang Wang, arqueólogo del Instituto Provincial de Reliquias Culturales y Arqueología de Hebei, comenzó la excavación del sitio en 2013, revela Bridget Alex, de Science. En un área de cuarenta metros cuadrados, a unos dos metros y medio bajo tierra, el equipo descubrió 382 artefactos de piedra, más de 400 pedazos de huesos de animales, los restos de una fogata, un trozo de tierra roja con dos piezas de color ocre, una piedra con forma de mortero y una losa de piedra caliza.
No está claro exactamente para qué se usaba el ocre, una roca rica en hierro, o cómo se procesaban estos materiales, pero normalmente se molía en varios polvos con herramientas de piedra, según la Biblioteca Pública de Ciencias.
Varias de las herramientas de piedra descubiertas tenían rastros de adhesivo, lo que sugiere que el pigmento puede haber sido utilizado como ingrediente para pegar mangos a las herramientas y como aditivo en el procesamiento de pieles
El ocre tiene muchos usos, entre ellos funciones simbólicas, como pintura corporal, protector solar y como componente de adhesivos. Varias de las herramientas de piedra descubiertas tenían rastros de adhesivo, lo que sugiere que el pigmento puede haber sido utilizado como ingrediente para pegar mangos a las herramientas y como aditivo en el procesamiento de pieles, según Live Science. Sin embargo, no se descarta la posibilidad de que el ocre también se haya utilizado con fines simbólicos.

El equipo utilizó la datación por radiocarbono y la luminiscencia estimulada ópticamente (que mide cuánto tiempo ha pasado desde que el sedimento estuvo expuesto a la luz solar) para fechar la capa de sedimento y los artefactos encontrados allí con una antigüedad de entre 39.000 y 41.000 años.
Se han descubierto pruebas del uso del ocre en África y Europa que se remontan a unos 300.000 años, y en Australia a unos 50.000 años
Los investigadores se sorprendieron por la edad, ya que antes de este hallazgo "la evidencia del uso de ocre en Asia antes (hace 28,000 años) era... muy escasa", declara el autor principal Francesco d'Errico a WordsSideKick.com. Se han descubierto pruebas del uso del ocre en África y Europa que se remontan a unos 300.000 años, y en Australia a unos 50.000 años, relata d'Errico.
Dirigido por Homo sapiens
Los arqueólogos sospechan que el taller de ocre encontrado en China estaba dirigido por Homo sapiens, pero no pueden decir con certeza que no fueran parientes humanos como los neandertales y los denisovanos. No hay fósiles humanos en el sitio, pero sí se ha encontrado en uno más joven cerca, según Live Science. La evidencia anterior sugería que los humanos modernos migraron por primera vez a Eurasia hace unos 60.000 años, escribe Donna Lu, de The Guardian, pero los restos humanos descubiertos en el sur de China datan de entre 80.000 y 120.000 años, lo que pone esa línea de tiempo en disputa.

Los artefactos de piedra descubiertos plantean más preguntas sobre esa línea de tiempo, ya que son únicos para la región y el período
Los artefactos de piedra descubiertos plantean más preguntas sobre esa línea de tiempo, ya que son únicos para la región y el período, según Science. La mayoría de los restos en forma de cuchillas mide menos de dos centímetros y está hecha de pedernal y cuarzo. Al arrancar las escamas de pequeños guijarros y luego unirlos a los mangos de hueso, las primeras herramientas podrían haberse usado para raspar pieles, taladrar madera y tallar plantas. Las hojas de piedra descubiertas en el sitio son anteriores a descubrimientos similares en el norte de China, Rusia y Japón, según The Guardian.
Por su parte, el coautor del estudio, Michael Petraglia, asegura que el sitio no se parece a nada descubierto anteriormente en el este de Asia, describiéndolo como "una señal potencial de un evento de migración de nuestra especie".
“Este sitio no encaja con nada de lo que sabemos. Tiene características culturales únicas”. “Este es un lugar único en Asia. Hemos identificado, en cierto sentido, una nueva cultura que surge de allí”, concluye.
Fuente: Simthsonian.