Significativa colección de Pontiac GTO, a subasta

pontiac gto subasta (1)
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El fundador de Mecum Auctions hace espacio en su garaje y pone a subasta una buena parte de su colección de Pontiac GTO, que incluye algunos ejemplares sumamente raros, e incluso únicos. Por Edmundo Cano Imágenes: Mecum Auctions   Desde su juventud, cuando su padre era dueño de una agencia Buick/Pontiac, Dana Mecum ha sido un entusiasta empedernido del Pontiac GTO. Tanto su padre como su madre manejaron ejemplares del muscle-car original durante su adolescencia, lo que lo marcó para toda su vida. Hoy, ser el dueño y fundador de la exitosa casa de subastas Mecum Auctions le ha permitido amasar una considerable colección de estos autos, y una parte de ella será ofrecida a subasta en el evento que Mecum llevará a cabo en Indianápolis, en junio de este año. Nada menos que 9 Pontiac GTO de diversos modelos y características serán ofrecidos al mejor postor. Entre ellos hay dos ejemplares de 1964, el primer año del ‘Goat’: un convertible en ‘Yorktown Blue’ equipado con la rara opción de aire acondicionado, transmisión de 4 velocidades, y un múltiple de carburación ‘tri power’ opcional en su cajuela, por si el dueño quisiera cambiar el carburador sencillo de 4 gargantas que el auto emplea actualmente.

Lobo en piel de oveja

El otro ’64 es un coupé que recibió el tratamiento ‘Royal Bobcat’, un paquete de tuning desarrollado por la agencia Royal Oak Pontiac para exprimirle algunos caballos de fuerza extras al GTO, incluido un ‘tune-up’ especial para los tres carburadores del motor 389. Algunos Royal Bobcats tenían tratamientos estéticos que presumían sus modificaciones, pero este auto no lo tiene, lo que lo convierte en un auténtico ‘sleeper’.   La subasta incluye tres modelos 1965, el primer de luces verticales. Uno de ellos, el convertible azul, es el más ‘regular’ de los tres… bueno, todo lo regular que puede ser un GTO en ‘Fontaine Blue’ con transmisión de 4 velocidades, diferencial ‘posi’, motor 389 ‘tri-power’ y llantas de línea roja con rines de lujo, pero solo porque los otros dos ’65 son las principales atracciones de la subasta.

El 'Pace Car' de Riverside

Uno de ellos es uno de dos ‘pace cars’ empleados para encabezar las 500 Millas de Riverside de NASCAR de 1965. El auto fue adquirido originalmente por Motor Trend Publishing –patrocinadores de la carrera- y nada menos que por George Hurst, sí, el creador de las legendarias palancas de velocidades clásicas de los muscle-cars. Este coche fue el elegido para presentar al público los rines Hurst, y hoy por hoy conserva el primer juego de esos rines jamás instalado en un automóvil. De los dos pace cars de la Riverside 500, este es el único que sobrevive. Un coche prácticamente único.  

Tigre dorado

El otro ‘65 es igual de único: el Hurst GeeTO Tiger, un auto realizado como el premio de un sorteo a nivel nacional organizado por Royal Oak Pontiac, Petersen Publishing y Hurst Performance, con 28 opciones de fábrica, el paquete Royal Bobcat, y piezas Hurst hechas especialmente para este coche. Vayan a leer su historia completa, que es verdadera fascinante, en este enlace.

Sobreviviente

Hay un solo modelo ’66 en la subasta, pero es el más original de todos: el coupé en ‘Starlight Black’ nunca ha sido restaurado, y tiene poco más de 59,000 kilómetros originales en su odómetro. El coche se ganó un certificado de ‘Gold Survivor’ de Bloomington Gold hace unos años, por su impresionante estado de conservación. Para ponerlo en perspectiva, Dana Mecum venderá este coche si y solo si quien sea el más alto pujante firma un acuerdo de que, si alguna vez lo vende, Mecum tendrá que ser el dueño de nuevo.

El único ’67 en la subasta es también uno de los más originales, aunque no llega al nivel del ’66 negro, por el hecho de que en algún momento de su vida, uno de sus dueños previos lo usó en carreras de cuarto de milla, por lo que cambió incluso su motor original de 400 pulgadas cúbicas por un 428. Afortunadamente, todos sus componentes originales fueron conservados, por lo que cuando lo vendió, desinstaló todos los componentes de alto rendimiento y reinstaló las piezas originales. El odómetro lee ¡21,800 kilómetros!

Ram Air IV

De allí brincamos a 1970, con dos ejemplares. El hardtop plateado porta bajo su cofre nada menos que un motor de 400 pulgadas cúbicas con el rarísimo y muy agresivo paquete Ram Air IV, una serie de componentes de alto rendimiento que le proporcionaban 375 hp; solo 627 GTOs fueron entregados con el conjunto Ram Air IV en 1970.  

¡Llegó El Juez!

El otro modelo ’70 hubiera sido la indiscutible estrella de la subasta si no estuvieran presentes el pace car de Riverside y el GeeTO Tiger: un ‘The Judge’ convertible. Solo 168 ‘Judges’ convertibles fueron fabricados en 1970, y solo un puñado portan el color ‘Verdoro Green’ de este modelo, bajo cuyo cofre vive un motor de 400 pulgadas cúbicas con el paquete Ram Air III de 366 hp. Acaso lo único que demerita un poco a este ejemplar es su transmisión automática.   ¿Les interesa adquirir alguno de estos ejemplares de la historia del primer muscle-car? Pues marquen los días 10 a 18 de julio para participar en la subasta, y procuren tener consigo las suficientes tarjetas de crédito como para pagar los estratosféricos precios que muchos de estos coches van a alcanzar. Pueden ver los detalles de la subasta en el sitio web de Mecum.