Nissan Note SR 2017: prueba de manejo

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Por Manuel Fernández (@Mfer_89)      Fotos: Carlos Quevedo

 

Con puntualidad recibe el Note el remozamiento que fue desvelado en el pasado Salón de Los Ángeles, algo por demás lógico si tenemos en cuenta que se hace en Aguascalientes, México. Esa amable estampa adopta la más futurista trompa que funge como imagen de marca desde la aparición del vigente Maxima, lo que implicó reformar parrilla, faros o la defensa con todo y faros de niebla, mientras elementos como los rines muestran un nuevo diseño y, en este acabado SR, se estrenan unos retrovisores con intermitente integrado y, según pudimos notar, mejor visibilidad. Otro adicional al exterior del SR es el paquete estético de alerón y faldones.

 

 

Aun cuando en los últimos años se han visto propuestas realmente innovadoras en el segmento, el Note sigue siendo uno de los líderes si solo analizamos una variable: espacio. Es una de las mejores alternativas si se van a ocupar con frecuencia las plazas traseras, con piernas que van holgadas y un piso casi plano, lo esperable para una carrocería más cercana a un miniván que a un hatchback convencional.

 

 

Para este modelo 2017, la cabina presenta unas convenientes actualizaciones que le restan simpleza, partiendo de unos nuevos instrumentos, apliques negro piano u otros mandos de climatización. Nissan también hizo algunas variaciones a partir de la retroalimentación de sus clientes y es por eso que ahora hay un toma de 12 voltios adicional en la consola, puesta justo atrás de una hendidura donde cabe un teléfono. Además, adelante del selector se ubican dos no muy profundos portavasos justo abajo de un puerto USB y la entrada auxiliar, acompañando a otro tomacorriente.

 

 

El volante también se sustituyó, aunque sigue sin ser ajustable en profundidad y estando en una posición inclinada que afecta la postura de conducción, que quizá tampoco es la más favorable por unos asientos que si bien ganaron presencia con sus nuevas vestiduras contrastadas en colores vivos y un tapizado tipo Alcántara, no ofrecen el mejor soporte para la espalda. A favor, eso sí, el apoyabrazos delantero, que acompaña a otro para quienes viajen atrás que además incluye portavasos.

 

 

La única intervención mecánica fue el recalibrado de la caja CVT, que del pasado Note mantiene ese comportamiento en el que quiere simular los pasos de una transmisión convencional y evita que la aguja del tacómetro se quede fija en un mismo sitio. Notamos una tendencia mayor a mantener bajos regímenes y hay que exigir un poco más el pedal derecho de requerirse una aceleración súbita.

 

 

En lo demás, nos es familiar una marcha que aguanta bien nuestra pésima red vial y no resulta tan saltona o ruidosa incluso rodando sobre las llantas de menor perfil en esta vertiente más equipada. La comodidad es una virtud en ese sentido, pero ciertos balanceos notorios y una ligerísima dirección que de todas maneras no sufre de delicadezas en autopistas nos dejan claro que el conjunto está contento en la ciudad o en carreteras a ritmos moderados, nada de exigencias.

 

 

Al final, la actualización del Note es positiva al añadirle un toque más juvenil al exterior y a la cabina. ¿Qué le falta? Un equipamiento de seguridad que vaya más allá de lo mínimo indispensable. 

 

Unidad probada

272,500 pesos (a fecha de la publicación)

 

NOS GUSTA

-      Vasto espacio interior

-      Cajuela versátil

-      Apariencia más juvenil

 

NOS GUSTARÍA

-      Control de estabilidad y más airbags

-      Una quinta cabecera

-      Mejores asientos

 

Resumen técnico

MOTOR

Tipo/cilindrada: L4, 1.6 l

Potencia máxima: 109 HP a 6,000 rpm

Par máximo: 145 Nm a 4,400 rpm

TRANSMISIÓN

Caja: Automática, CVT

Tracción: Delantera

DIMENSIONES

Largo x ancho x alto: 415 x 169 x 153 cm

Distancia entre ejes: 260 cm

Cajuela: 272 litros

Peso vacío: 1,100 kg

PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm)

0 a 400 metros: 20.04 s

Rebase 80 a 120 km/h: 13.22 s

Frenado de 100 a 0 km/h: 52.3 m

Consumo medio: 14.25 km/l