Por Manuel Fernández y Equipo de Pruebas Fotos: José Luis Ruiz Edición para online: Manuel Fernández
Resumen técnico
Audi Q3 2.0 TFSI quattro | BMW XDrive28i | Range Rover Evoque Si4 | |
MOTOR | |||
Tipo/cilindrada: | L4, 2.0 l, turbo | L4, 2.0 l, turbo | L4, 2.0 l, turbo |
Potencia máxima: | 211 hp entre 5,000 | 245 hp entre 5,000 | 240 hp a 6,000 rpm |
y 6,200 rpm | y 6,500 rpm | ||
Par máximo: | 200 Nm entre 1,800 | 350 Nm de 1,250 | 340 Nm de 1,900 |
y 4,900 rpm | a 4,800 rpm | a 3,500 rpm | |
TRANSMISIÓN | |||
Caja: | Manual robotizada, | Automática, | Automática, |
siete velocidades | ocho velocidades | nueve velocidades | |
Tracción: | Integral permanente | Integral permanente | Integral permanente |
DIMENSIONES | |||
Largo x ancho x alto: | 439 x 183 x 159 cm | 447 x 179 x 154 cm | 437 x 197 x 164 cm |
Distancia entre ejes: | 260 cm | 276 cm | 266 cm |
Cajuela: | 460 litros | 420 litros | 545 litros |
Tanque de combustible: | 64 litros | 63 litros | 70 litros |
Peso vacío: | 1,565 kg | 1,670 kg | 1,640 kg |
PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm) | |||
0 a 400 metros: | 16.61 s | 15.22 s | 17.37 s |
Rebase 80 a 120 km/h: | 5.59 s | 4.68 s | 6.71 s |
Frenado de 100 a 0 km/h: | 38.1 m | 39.0 m |
39.8 m |
Mercedes-Benz GLA250 | Volvo V40 XC T5 | |
MOTOR | ||
Tipo/cilindrada: | L4, 2.0 l, turbo | L5, 2.5 l, turbo |
Potencia máxima: | 211 hp a 5,500 rpm | 254 hp a 5,400 rpm |
Par máximo: | 350 Nm de 1,200 | 360 Nm de 1,800 |
a 4,000 rpm | a 4,200 rpm | |
TRANSMISIÓN | ||
Caja: | Manual robotizada, | Automática, |
siete velocidades | seis velocidades | |
Tracción: | Integral permanente | Integral permanente |
DIMENSIONES | ||
Largo x ancho x alto: | 441 x 180 x 149 cm | 437 x 178 x 147 cm |
Distancia entre ejes: | 269 cm | 264 cm |
Cajuela: | 421 litros | 335 litros |
Tanque de combustible: | 56 litros | 57 litros |
Peso vacío: | 1,505 kg | 1,630 kg |
PRUEBAS AUTOMÓVIL (a 2,240 msnm) | ||
0 a 400 metros: | 16.32 s | 16.01 s |
Rebase 80 a 120 km/h: | 6.33 s | 5.36 s |
Frenado de 100 a 0 km/h: | 38.2 m | 37.7 m |
La fórmula obedece a un principio con varias interpretaciones: una camioneta pequeña y funcional cuyo tamaño no implique sacrificios en distinción o desarrollos en su nivel tecnológico. La esencia de un producto Premium empacada en una SUV de dimensiones que no superan los 4.50 metros de longitud y no bajan de los 4.35, es decir un peldaño abajo de las ejemplares evaluadas en el Master Test de la AP 217 y todavía uno por encima de pequeños crossovers, como el Buick Encore y los MINI Countryman y Paceman.
Si bien podría haber algún precedente no tan exitoso (nunca falta el que reclama el trono cuando otro ya lo tomó en una movida más audaz), es seguro decir que el nacimiento de este grupo se dio cuando, por allá en 2009, BMW lanzó el escalón de acceso a su portafolio de SUVs con la X1, que podría verse como una guayín elevada pero, al final, se aleja de un Serie 3 Touring sólo por el hecho de contar con una carrocería e interior del todo distinta, un acceso más fácil a su cabina y un planteamiento un poco más enfocado hacia la conducción en terrenos escarpados.
Y únicamente bastó un lustro para que otras firmas de lujo respondieran, pero como no había unas reglas implícitas establecidas para el nuevo segmento, fenómeno que se da con un paso del tiempo mucho mayor, Mercedes-Benz y Audi optaron por usar plataformas de compactos existentes con una base de tracción delantera y motor transversal. Volvo hizo casi lo mismo, pero fue más práctico y resolvió esta necesidad para competir adaptando su hatchback V40 en lugar de crear un derivado, mientras Land Rover fue la más audaz al ampliar los horizontes de su subdivisión Range Rover, naciendo así una Evoque difícil de clasificar al ser más ancha y más alta que las demás, pero por largo, dimensiones internas, oferta mecánica y posicionamiento en la gama, encaja a la perfección.
Es así que nos queda un grupo de cinco productos casi idénticos por su arsenal tecnológico en cuanto a confort, seguridad y especificaciones bajo el cofre.
Pero el propósito del Master Test es desglosar esas mínimas diferencias que puedan existir entre un conjunto de contrincantes que en este caso son todos buenos y determinar cuál es el mejor de acuerdo a nuestras detalladas valoraciones y pruebas dinámicas.
Alce en seco:
Se simula la reacción ante un obstáculo que bloquea intempestivamente la trayectoria en una vía de dos carriles y sentidos. Así, se evalúa la capacidad de respuesta de la dirección, suspensión y asistencias para mantener el control. Se corona la impecable obediencia de una V40 XC que apenas se inmuta para sortear la exigencia. Batalla la masa de la Evoque que, en cambio, la avienta de frente.
Alce en mojado:
Mismo principio del alce en seco aunque con el reto que supone una superficie de menor adherencia. Ocupar el último lugar en una cerrada competencia como esta es relativo; después de todo, la etiqueta Premium no es gratuita. Dicho esto, el ejercicio se resuelve igual, con una V40 bajo dominio absoluto y una Q3 que retarda ligeramente el regreso, demandando en mayor medida la seguridad activa.
Slalom:
Vaivén mantenido con una velocidad creciente que nos permite conocer el ajuste de la suspensión, la respuesta de la dirección o la calidad de las llantas. El mejor ejemplar fue la V40 debido al ajuste firme y un guiado que en todo momento se mantiene suave y preciso. Del otro lado se encuentra la Evoque, que balancea notablemente, exigiendo a las asistencias para mantenerse en trayectoria.
Curva infinita:
Permite conocer el límite máximo de agarre, la respuesta del chasis a una carga continua y la adherencia de los neumáticos. La mejor fue la Mercedes-Benz GLA debido a gomas de buena tracción y ayudas de intervención sutil que nos mantienen en trayectoria. ¿La contraparte? La Q3, cuya distancia entre ejes y ESP permisivo hacen que se vaya de atrás sin mayores consecuencias.
Frenado en Curva:
Simula una detención abrupta mientras se aborda un giro, situación que evalúa el agarre de las llantas y la correcta reacción de los frenos mediante asistencias como el ABS o el control de estabilidad. La mejor fue una GLA que hizo las maniobras con tranquilidad, apenas con algún leve deslizamiento de atrás. Le costó a una X1 cuyo ABS entraba con la contundencia debida pero abría mucho la trayectoria.
Frenada Mixta:
Recrea una parada en la que las llantas de un lado pisan una superficie de distinto agarre a sus equivalentes opuestas (como cuando a uno le cierran y sacan de la vía), exigiendo un trabajo complejo de la electrónica para evitar descontroles. Gana una GLA por un ABS sutil, la mejor distancia y pocos nervios. Al otro lado queda una Evoque correcta, pero que demora más en detenerse por su mayor peso.
El veredicto
Grata sorpresa resultó siendo el V40 XC (552), que casi se corona apenas cinco puntos por debajo de la fresca y competitiva GLA (557). La ganadora de esta evaluación es un producto equilibrado virtud de una excelente puesta a punto, un interior bien fabricado y una planta motriz no muy contundente pero cumplidora.
En el tercer escalón queda una Q3 (525) ágil de llevar y con una cabina sólida y más amplia de lo que aparenta. Sigue una X1 (522) dinámicamente bien resuelta, con el mejor conjunto motor-caja y suspensión y detalles de acabado muy austeros. Al final, está una Evoque (502) muy enfocada hacia un habitáculo lujoso por materiales y acogedor por diseño general, que por su orientación más hacia la conducción fuera de asfalto (sin que sea nada malo dentro de él), no reacciona con la misma limpieza de las otras pequeñas SUVs participantes, manteniendo de cualquier modo ese vital margen de seguridad tan necesario en el tránsito por las carreteras mexicanas.
Un grupo muy cercano, con todas las alternativas calificando de válidas para quien tenga la fortuna de contemplarlas.