Por José Virgilio Ordaz (@Neckriagen).
La Ford B-Max es una miniván o monovolumen subcompacta (al estilo de la Chevrolet Meriva que conocimos hace unos años) que surgió en 2012 con el fin de sustituir a la Fusion europea, vehículo multipropósito que sólo compartió el nombre con el sedán americano.
Sin embargo, como bien sabemos, en todo el mundo, no sólo en los Estados unidos, varios segmentos están siendo avasallados por el crecimiento de las SUVs/Crossovers y los monovolúmenes han sido particularmente diezmados. Por ello, ante su escasa penetración comercial, Ford acaba de anunciar que la pequeña miniván producida en Rumania no verá la luz más allá de septiembre de este año.
Pero la planta de Caiova no se verá desamparada, pues recibirá a cambio en el último trimestre del año la producción europea de la revisada EcoSport. La crossover subcompacta global de Ford se produce actualmente en Brasil, India, Tailandia y Rusia, aunque luego de la confirmación del arribo del modelo a los Estados Unidos parecía poco probable que se exportara desde algunos de estos países, cobrando más sentido que la variante europea, ahora producida en Rumania, será enviada a la Unión Americana.
A propósito de este anuncio, Robert Stiller, director de desarrollo del Ford Fiesta, indicó a medios rumanos que la más reciente generación del subcompacto fue creada con la intención de apuntar a los mercados EMEA (Europa, Medio Oriente y África) “En Norteamérica, especialmente en Estados Unidos, China y Latinoamérica, la demanda de este tipo de productos está disminuyendo y estamos reaccionando en consecuencia”, señaló el ejecutivo.
Esto no es gratuito, tan sólo comparando 2016 contra 2015, las ventas del Fiesta cayeron un 24% en Estados Unidos, pasando de 64,458 a 48,807 unidades desplazadas. En México la historia no es muy diferente, pues ha sido desplazado por el Figo proveniente de la India, que ya se coloca como el producto más vendido de Ford en México.
Mientras que en Europa el Fiesta de séptima generación ya está a la venta, los meses van pasando sin que se confirme para Norteamérica, de ahí que el cese de su comercialización en Estados Unidos, que podría darse el siguiente año, gane fuerza. En caso que además cesara la producción en México, todavía podría llegarnos desde Brasil o Tailandia, aunque es más probable que llegase de India, como el Figo, o de China, como el próximo Focus, aunque no parece haber un modelo que le sustituyera en Cuautitlán Izcalli.