Daniel Lierah y Arturo Martínez, los nombres que están detrás de Martínez Lierah y que crearon su estudio en París en 2010 para empezar un proyecto de diseño, han sido los ganadores del premio 080 Barcelona Fashion, que está dotado con 20.000 euros.
Sus propuestas, básicamente en negro con algún toque prusia, parecen inspiradas en la escuela de Amberes, por las líneas de las faldas y los vestidos, con mucho patrón y muy buena confección.
El día ha empezado con Sur, de Laura Figueras, que ha presentado su primera colección inspirada en la isla de Capri, muy blanca y sencilla, y ha seguido con Yolan Cris, diseñadora de novias, que se ha lanzado a la fiesta a partir de los elementos que mejor maneja, como los encajes.
Siki Im, que comenzó su carrera de moda en Nueva York como diseñador sénior de Karl Lagerfeld y Helmut Lang, y presentó en septiembre de 2009 su primera colección en esta ciudad, ha mostrado en Barcelona propuestas inspiradas en países lejanos.
Además, han generado muchos aplausos Lurdes Bergada y Syngman Cucala con prendas como rescatadas de una hecatombe, grises y descolgadas, y Justicia Ruano también ha dejado un buen sabor con conjuntos muy bien hechos, equilibrados y con algún toque ácido.
Además de pasarela de moda, el 080 ha tenido hoy otras actividades como el Festival LLUNÀTICS-080, que pretende consolidar el certamen como una plataforma para internacionalizar la moda y fomentar la sinergia entre diseñadores, ingenieros y empresas que apuestan por la innovación y la industria textil.
En este espacio la directora de comunicación y asuntos público de Google, Marisa Toro, ha explicado los proyectos más innovadores de la empresa y ha presentado en España las Google Glass, una montura de gafas inteligente que está en fase de proyecto y que permite otra forma de comunicarse.
Con estas gafas se puede compartir con otra persona lo que se ve a través de la cámara, gracias al ordenador que lleva incorporado, y sus creadores están convencidos de que estas gafas futuristas cambiarán la vida de la gente.
Están nuevas gafas, que están dotadas con toda la tecnología actual, tienen reconocimiento de voz pero no son un teléfono ni una tableta.
En una entrevista a Efe, Toro ha recordado que en su afán por desarrollar tecnologías, Google tiene otro proyecto en paralelo que está empezando a ser una realidad, el coche que se conduce sin conductor, que han desarrollado en colaboración con Toyota Prius, y que tras hacer más de 350.000 kilómetros de pruebas ya funciona en EEUU por el estado de Nevada.
El vehículo funciona a partir de los mapas y sistemas de geolocalizador y de posicionamiento de Google y pretende ayudar a reducir los accidentes de tráfico, ya que en gran parte de los accidentes mortales la causa está en el hombre.
Marisa Toro ha remarcado que en este coche el usuario marca las ordenes y la dirección, y según la información que recibe, los sistemas escogen el mejor camino, una nueva situación que entrará en conflicto con la realidad actual y cambiará las normas, como la forma de ver los seguros, porque ya no habrá un hombre al volante.