Las matriculaciones de turismos finalizarán 2023 en el entorno de las 950.000 unidades, esto es un 16,8 por ciento más, según las previsiones de Ganvam, Asociación Nacional de Vendedores y Reparadores de Vehículos. En palabras de su presidente, Raúl Palacios, no será hasta 2025 cuando se alcancen la barrera del millón y hasta 2029 cuando se logra alcanzar su “nivel natural” de 1,2 millones anuales, por población, motorización y renta per cápita.
Para 2024, -que prevé rozar el millón- se espera un crecimiento de un 3,5 por ciento en particulares, a diferencia del 15,4 por ciento de este año debido a la demanda embalsada de años anteriores. La pérdida de poder adquisitivo está posponiendo las decisiones de compra, ha matizado. Las empresas por su parte pasarán de un crecimiento del 12,5 de este año al 3,9 por ciento por una ralentización de la economía.
En el almuerzo anual con la prensa, Raúl Palacios ha destacado el cambio de negocio en el que están inmersos los vendedores hacia la gestión del dato, para subsistir en la nueva movilidad. Ha destacado la importancia de que Europa reconozca al importancia de que el dato sea del usuario y no del fabricante. Se trata del primer pilar para que las pymes puedan desarrollar servicios personalizados.
Respecto al mercado de VO, las previsiones apuntan a un crecimiento del 2,5% en 2023, quedándose a las puertas de los dos millones de unidades vendidas. Para 2024 crecerán un 1 por ciento alcanzando las 1.956.463 unidades.Según sus previsiones para el 2024 los vehículos con más de 10 años coparán el 56% de las ventas de VO.
Tres peticiones
Desde Ganvam hacen tres peticiones al nuevo Gobierno. La primera es “que no nos deje huérfanos” a la hora de gestionar los PERTE. Ya que hasta ahora se les ha dejado fuera de los planes. Ha recordado que 350.000 personas viven de la distribución en nuestro país.
En segundo lugar, ha pedido políticas eficaces de descarbonización en las que no solo se contemplen los vehículos eléctricos, sino también VO de hasta 5 años, que cumplen la normativa Euro 6. Ha recordado que la edad media del parque roza los 15 años, de forma que quien tienen un coche de esa antigüedad es casi imposible que se sustituya por un vehículo nuevo eléctrico del entorno de los 35.000 euros. "Si queremos retirar parque viejo tenemos que incluir vehículos de hasta 5 años", ha comentado.
En tercer lugar, ha pedido que la nueva movilidad aporte a nivel económico y nivel social. No puede poner en riesgo la industria del automóvil. "Nadie duda de que el vehículo eléctrico es el futuro pero sí de cómo se esta haciendo, sin tener en cuenta la red de recarga, ni si es la solución para la mayoría". No puede ser que la movilidad sostenible sea para las rentas mas altas.
