Peugeot y Citroën aumentarán su cuota de mercado en Brasil y China

El presidente de PSA Peugeot-Citroën, Jean-Martin Folz, se ha mostrado optimista durante el congreso organizado por la publicación "Automotive News Europe", celebrado en Gothenburg (Suecia). En opinión de Folz, el Grupo galo puede incrementar su cuota de mercado en Brasil este año.

"Éramos el mayor importador en Brasil y nos hemos convertido en el fabricante local más pequeño", ha afirmado Folz, quien se ha atrevido a realizar una predicción sobre la cuota que PSA conseguirá este año en el mercado brasileño: un 4,8 por ciento. Esta cifra representa una importante subida respecto al 3,2 por ciento obtenido en 2001.

Las previsiones son optimistas, teniendo en cuenta la situación económica que vive Brasil, influida por los problemas financieros de Argentina. A pesar de todo, Folz ha marcado Latinoamérica como uno de los principales objetivos para realizar su expansión internacional, junto con China y Europa Central y del Este.

La cuota de mercado de PSA, según los planes de su presidente, se mantendrá (o, incluso, aumentará) en el Viejo Continente. Actualmente, dicha cuota es del 10,5 por ciento, aunque Folz prevé que llegue al 12,4 por ciento a finales de mayo de 2002.

En China, el Grupo francés ha firmado un nuevo acuerdo con su socio habitual, Dongfeng, por el que se producirán seis modelos en la planta de Wuhan. La compañía espera matricular 150.000 unidades en el país asiático en 2004.

Por otra parte, Folz subrayó que –con el fin de reducir costes-, se pretende que el 85 por ciento de los modelos de Citroën y Peugeot compartan sus plataformas (o la mayoría de sus componentes) en 2003 o 2004. En 2002, el 65 por ciento de los vehículos que salgan de las líneas de montaje de PSA tendrán chasis compartidos, lo que ayudará a optimizar la capacidad de producción de las plantas del Grupo.

Nuevas cajas de cambios para los coches de la gama media


La factoría de Valenciennes (Francia) de PSA acogerá la unidad de fabricación de un nuevo tipo de cajas de cambio. Este proyecto, valorado en 430 millones de euros (71.546 millones de pesetas), estará finalizado en 2005 y creará 200 empleos directos en tres años.

La nueva transmisión, caracterizada por una gestión electrónica perfeccionada del embrague, contará con 6 marchas y podrá funcionar de forma manual o automática. Además, según el constructor, permitirá una reducción del consumo.

Peugeot y Citroën incorporarán la nueva caja de cambios a sus vehículos de gasolina y Diesel de la gama media.

Folz informó ayer de este proyecto al primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, quien subrayó que el plan reforzará la fábrica de Valenciennes, donde 2.300 personas producen 6.500 cajas de cambios diarias.