Los usuarios de grúa tienen derecho a elegir taller donde reparar el coche

La Comunidad de Madrid ha recordado que los consumidores tienen derecho a elegir el taller donde llevar el vehículo ya que la grúa no le puede imponer uno en particular, al igual que las autopistas tampoco pueden imponer una empresa de grúas, según ha informado el un comunicado el Gobierno regional

Este es uno de los derechos que, con motivo de la operación salida de vacaciones de Semana Santa, ofrece la Dirección General de Consumo en el Portal del Consumidor de www.madrid.org, en caso de que el coche sufra una avería. En esa misma dirección está disponible la Guía del Viajero en versión digital.

Asimismo, si se solicita una grúa, es importante pedir siempre una orden de servicio -en el caso de que se contrate a través del seguro- o un presupuesto previo y una factura -si se solicita de manera particular-. En el caso de no aceptar el presupuesto, la empresa puede cobrar por su realización un importe no superior al precio de los kilómetros recorridos desde donde se encontrara la grúa hasta el vehículo averiado.

Al dejar el coche en el taller, el consumidor debe exigir un resguardo de depósito que garantice que se ha entregado en unas condiciones determinadas. Si el establecimiento da al cliente un presupuesto escrito en el momento de dejar el automóvil, no hará falta ese resguardo. Es muy importante solicitar presupuesto de la reparación y no conformarse con estimaciones.

El Gobierno regional ha explicado que muchas reclamaciones suelen darse cuando el cliente renuncia a la realización del presupuesto (renuncia que debe hacerse por escrito) y al final la factura supera con creces las estimaciones realizadas verbalmente. En caso de que una vez hecho el presupuesto el cliente rechace la reparación, éste deberá pagar por su realización.

El taller no puede reparar un coche sin el consentimiento expreso del dueño, ni usar piezas de segunda mano (salvo que lo autorice el cliente). Sin embargo, sí puede cobrar gastos de estancia en caso de que el cliente no recoja el coche transcurridos tres días desde que la empresa le avise de que está reparado o hecho el presupuesto.

Por otro lado, todos los talleres mecánicos deben estar homologados, mostrar una placa oficial identificativa y exponer los precios de forma visible al público. La factura es fundamental para hacer uso de la garantía o para poner una reclamación, en el caso de que fuese necesario.

El aumento de los desplazamientos por carretera en estas fechas también provoca un crecimiento de las consultas y reclamaciones relacionadas con el alquiler de vehículos, los servicios de grúas, las gasolineras y los talleres de reparación. En 2010, la Comunidad de Madrid registró cerca de 1.500 reclamaciones sobre estos sectores, buena parte de las cuales llegó tras la Semana Santa y el verano.

Según la Comunidad, un problema habitual está relacionado con los desperfectos en los coches de alquiler y su atribución y cargo al consumidor. La Dirección General de Consumo ha destacado que si el cliente no puede demostrar que el arañazo ya existía cuando alquiló el vehículo, deberá responder por ello.

Por ello, el consumidor debe asegurarse, antes de firmar el contrato de alquiler, de que el vehículo está en perfectas condiciones, libre de desperfectos tanto en el exterior como en el interior, y que dispone de todos los elementos obligatorios según la normativa de seguridad vial, como chalecos reflectantes, luces de recambio, rueda de repuesto, triángulos, etc.