Al finalizar el año 2006, la flota de vehículos española que funciona bajo renting llegó hasta las 503.006 unidades, lo que supone un crecimiento del 12,8 por ciento respecto al año anterior. Las compras en 2006 de nuevos vehículos por parte de las empresas de renting para su posterior alquiler subieron 11,8 por ciento, totalizando 185.173 unidades. El sector facturó en el pasado ejercicio 3.940 millones de euros, un 19,6 por ciento más que en 2005.Las pequeñas y medianas empresas (pymes) han dado un importante impulso al renting en España en 2006. Según la Asociación Española de Renting (AER), han supuesto el 57 por ciento del total del crecimiento del sector y son ya el 28 por ciento de la flota total. Agustín García, presidente de AER, afirma que durante el pasado ejercicio, las pymes han «superando a la gran empresa y su flota ha crecido en un 30 por ciento».Por sectores, las empresas que más eligen el renting para formar su flota de vehículos son las pertenecientes al sector químico, el comercio al por mayor, inmobiliarias y construcción, alimentación y bebidas, construcción de maquinaria y equipos mecánicos, y las relacionadas con las actividades informáticas.
Ford Focus
Renault Megane
Renault Kangoo
Volkswagen Passat
Peugeot 407
Opel Corsa
Seat Ibiza
Citroën Berlingo
Seat León
Peugeot Partner
Fuente: AER. Datos de 2006, año completo.
Renault
Opel
Ford
Peugeot
Citroën
Volkswagen
Seat
BMW
Audi
Nissan
Fuente: AER. Datos de 2006, año completo.
El renting es un alquiler a largo plazo con todos los servicios incluidos. Su objetivo, según la Asociación Española de Renting (AER) es «facilitar la utilización del bien, no su compra, en las mejores condiciones y con el servicio más completo posible».
Como explican en la AER, su funcionamiento es sencillo: «la compañía de renting compra un vehículo nuevo, a solicitud de su cliente, y lo pone a su disposición por un plazo de tiempo previamente estipulado entre ambas partes y con todos los gastos incluidos. A cambio se paga una cuota mensual que cubre todos los servicios reflejados en el contrato».
El cliente, nos explican desde la patronal del sector en España, «sólo tiene que ocuparse de elegir el modelo de vehículo que mejor se adapta a sus necesidades, la duración del contrato y el kilometraje estimado para dicho plazo.
Como principales ventajas de este tipo de alquiler, la AER, menciona «la seguridad a la hora de presupuestar a largo plazo el gasto del vehículo o flota, sin posibilidad de imprevistos; tiene ventajas fiscales; libera capital además de recursos técnicos y humanos que pueden destinarse por completo a las actividades propias de la empresa y no a gestionar la flota; incide positivamente en la mejora de la seguridad vial al facilitar el uso de vehículos nuevos (como media, los coches de renting no suelen superar los 42 meses de uso) e incluir en el contrato todas las revisiones recomendadas por los fabricantes».