Uno de los compromisos más importantes anunciados por el Gobierno catalán se fue ayer al traste. La nueva ministra de Fomento, la socialista Magdalena Álvarez, dio por fin respuesta a la iniciativa planteada en Cataluña por todos los sectores sociales: no se rescatarán los peajes de las autovías de la región. Su coste, 16.232 millones de euros, no permitiría realizar en España ninguna otra inversión en infraestructuras durante un plazo mínimo de cuatro años. El también socialista Pascual Maragall, presidente de la Generalitat, tendrá por tanto que desistir de su propuesta.Para Magdalena Álvarez, la medida de liberar los peajes es justa y necesaria, aunque materialmente inviable. Por ello, la propia ministra anunció su compromiso de que cualquier obra viaria que se ejecute en Cataluña a partir de ahora será siempre gratuita para los usuarios y defendió que la financiación de las infraestructuras recaiga en el sector público. “En el futuro, sólo podrán desarrollarse nuevas autopistas de peaje en aquellos corredores en los que ya exista una vía de gran capacidad de uso libre", subrayó.La titular de Fomento aprovechó el anuncio para reconocer que la distribución territorial de las autopistas de peaje no ha sido la adecuada hasta la fecha: “No ha respondido a criterios funcionales, sino a impulsos de privatización que dominaron en los últimos años de la dictadura y en el último período del Gobierno del Partido Popular".Álvarez aseguró también que uno de los objetivos de su departamento para los próximos años será conservar, mantener y mejorar las vías existentes para paliar la alta siniestralidad que registra nuestro país. Además, la ministra anunció la puesta en marcha de un nuevo “plan de choque" de conservación de firmes, en el que se licitarán un total de 50 actuaciones antes del próximo mes de agosto.Mientras, la polémica por liberar o no los peajes cuando las vías rápidas sufren fuertes atascos todavía continúa hoy. Si ayer fueron los transportistas y empresarios quienes pidieron que una autopista sea gratuita cuando no ofrece el servicio deseado, esta vez el turno le ha tocado al club automovilista RACC y a la Organización de Consumidores y usuarios de Cataluña (OCUC). Éstas han solicitado a las empresas concesionarias que “si hay congestión u otra incidencia que dificulte la circulación por las vías de pago, deberían informar a los automovilistas con antelación y, en algunos casos, permitirles el paso gratuito". Por otra parte, el espectacular socavón de casi 200 metros registrado este fin de semana en la calzada de la autopista AP-7, en Gerona, tardará varios meses en ser reparado, según ha admitido al diario El Periódico un responsable de Acesa, la empresa concesionaria. En un intento por paliar los numerosos desplazamientos que registra esta carretera durante los meses de verano, Acesa ha comenzado ya la construcción de dos carriles provisionales en la calzada derecha, llegando desde Francia. Las máquinas trabajan día y noche para ponerlo en funcionamiento este mismo fin de semana.No tardará tanto en abrirse la calzada de la hundida en la A-3, a la altura de Perales de Tajuña, en Madrid. El Ministerio de Fomento informó ayer de que esta vía recuperará la normalidad a lo largo de este mes tras culminar las labores de reparación del socavón, que mantiene cortado desde abril un tramo de seis kilómetros en sentido Valencia.
Fomento no rescatará los peajes catalanes
Circular por las autovías en Cataluña seguirá costando dinero. La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, aseguró ayer que no se pueden rescatar los peajes actuales porque su coste impediría realizar infraestructuras en España durante cuatro años. Eso sí, a partir de ahora, cualquier obra viaria que se ejecute en la comunidad será gratuita para sus usuarios.
