En el discurso de la inauguración oficial del nuevo edificio del Instituto Químico de Sarrià (IQS) de Barcelona, el príncipe Felipe ha dicho que la investigación y la docencia han de estar al servicio de la sociedad 'con sentido práctico' y ha puesto como ejemplo a este centro, que servirá, ha añadido, para establecer 'lazos de unión' con la industria y las empresas.
El edificio es una construcción de diez plantas de 10.800 metros cuadrados, de los cuales 5.600 están destinados al uso docente, lo que supone, con una inversión de 18 millones, un 44 % más de los que disponía hasta la fecha el IQS, una institución con más de cien años de historia docente.
El príncipe, que ha hecho parte de su discurso en catalán, ha alabado el prestigio internacional de este centro, integrado en la Universidad Ramon Llull desde 1990, que con estas instalaciones -ha dicho- 'ha sabido ampliar con eficiencia su vocación interdisciplinaria' y adaptarse 'a los nuevos tiempos' como han hecho otros centros punteros europeos.
Ha subrayado que el IQS ha hecho honor a su lema 'el trinomio: Persona, Ciencia y Empresa' y que ha sabido incorporar las internacionalización en el ámbito universitario y orientar a sus alumnos a la finalidad productiva que 'contribuirá a una mayor prosperidad del país'.
El IQS es una de las principales escuelas del país que en los últimos años ha diversificado su oferta formativa centrada tradicionalmente en el entorno de la química hacia otros ámbitos, como la ingeniería industrial o los estudios de administración.
La construcción del nuevo edificio, que ha entrado en funcionamiento en este curso y que acogerá los estudios de la IQS School of Management en los estudios y del IQS Executive, ha contado con el patrocinio de empresas y particulares que han aportado un capital de 2,2 millones de euros.
Tras descubrir una placa bendecida por el cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, Don Felipe ha visitado las instalaciones, que disponen de quince aulas para un millar de alumnos, cuarenta despachos, salas de reuniones y un espacio de 350 metros cuadrados destinados al Laboratorio SEAT y de mecánica en general.
El príncipe Felipe ha podido compartir impresiones con algunos miembro del profesorado y el alumnado de este centro que tiene como objetivo, señalan sus responsables, crear talento, potenciar la innovación e impulsar el espíritu emprendedor para incrementar la competitividad industrial.
En el acto han estado presentes la presidenta del Parlament, Núria de Gispert; la delegada del Gobierno; Llanos de Luna, el alcalde de Barcelona, Xavier Trias; la secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio, y el conseller de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Collell, entre otras personalidades.