El nuevo Prever incorpora ventajas para los Diesel

La reforma del Plan Prever se ha convertido en un goteo de sorpresas. Después de que el Gobierno anunciase su intención de prorrogar el plan hasta 2006, se han ido conociendo poco a las principales novedades de esta nueva etapa del Prever. Ahora se añade la posibilidad de comprar coches con motor Diesel, una opción que no se contemplaba.

A partir de 2004, aquellas personas que entreguen a la chatarra un coche con más de 10 años de antigüedad podrán acogerse a las subvenciones del Plan Prever para comprar uno nuevo, o con menos de cinco años de antigüedad, con motor de gasóleo.

La gran novedad está precisamente en esta última posibilidad: comprar un coche Diesel. Hasta ahora, si se entregaba un coche antiguo, de gasolina con plomo, y se compraba uno nuevo de gasolina sin plomo, se recibía una ayuda de 721,21 euros. En adelante, la misma cantidad se recibirá si se cambia el gasolina con plomo por un Diesel.

Con la modalidad anterior, el cambio de coche de gasolina con plomo sólo se subvencionaba si se entregaba para comprar uno con catalizador. Se entendía que los Diesel ya se vendían lo suficiente como para necesitar más estímulos.

Sin embargo, ahora el Gobierno ha decidido dar un empujón más al mercado de gasóleo y permite que se subvencione la sustitución de los viejos gasolina con plomo por Diesel modernos.

El mecanismo para efectuar el cambio será otra vez la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos del Estado de 2004. El grupo Popular en el Senado ha introducido esta última enmienda que, como el resto de cambios, tendrá validez a partir del 1 de enero.

La semana pasada y fuimos desgranando las novedades del Prever para el periodo que va de 2004 a 2006. Además de su extensión temporal (se pensaba que se prorrogaría sólo hasta finales de 2004) se han introducido cambios de calado, como la posibilidad de sustituir el coche viejo por otro usado de menos de cinco años.
Además, el vendedor del coche de segunda mano se beneficiará de una deducción por el mismo importe en el IRPF (Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas) o en el impuesto de sociedades, según corresponda.

La idea del Gobierno es ir hacia un parque móvil más moderno, compuesto por coches más seguros y energéticamente más eficientes. Además, se quiere dar impulso a las ventas de segunda mano que, en España, presentan cifras muy bajas en comparación con otros países europeos.