El Alfa 159, cinco estrellas Euro NCAP

El Alfa 159, la última berlina deportiva de Alfa Romeo, acaba de ver reconocido su equipamiento de seguridad con las cinco estrellas Euro NCAP. La distinción premia el alto nivel de protección que el coche italiano brinda a sus pasajeros.

Euro NCAP, el organismo europeo independiente que evalúa la seguridad de los coches, ha decidido incluir al Alfa 159 en el selecto grupo de los vehículos que tienen cinco estrellas como valoración de sus equipos de seguridad. Esta puntuación, la máxima que otorga Euro NCAP, hace referencia tanto a la seguridad activa como a la pasiva.

Los técnicos de Euro NCAP han asignado cinco estrellas al nivel de protección para los pasajeros. Además, han puntuado con cuatro estrellas la protección de los niños. Sin embargo, el Alfa 159 saca una nota bastante pobre, una estrella, en la protección de peatones

Satisfacción
En Alfa Romeo celebran el resultado y destacan que el 159 se ha construido para “obtener una calidad máxima sin compromisos". Señalan también los numerosos test que ha superado el coche hasta alcanzar su estado definitivo. En estos exámenes, los ingenieros de Alfa han ido poniendo a punto la estructura, haciendo hincapié en la utilización de materiales de alta calidad, piezas de chapa de diferentes espesores y técnicas avanzadas de soldadura láser. Así, el 159 ofrece una gran rigidez torsional de la carrocería.Además, cuenta con ocho airbags, incluyendo los de rodilla y los de cortinilla. También hay cinturones de seguridad con pretensores y limitadores de esfuerzo, reposacabezas activos, ABS, control de estabilidad, sistema antideslizamiento, ayuda a la frenada de emergencia y sistema de arranque en cuesta.En Terra Autopista ya hemos conducido el Alfa 159. Estuvimos en el contacto que la firma italiana organizó hace unos meses y tuvimos ocasión de conocer de cerca sus excelentes aptitudes. Si quieres conocer los detalles, no te pierdas este apasionante artículo.

EuroNCAP (European New Car Assessment Programme) realiza sus tests para intentar simular los accidentes más cotidianos en la vida real. Todos los coches que pasan por sus manos son adquiridos por la organización de forma anónima: así aseguran que las marcas no los han “preparado". Se trata de los mismos vehículos que luego se ponen a la venta. Además, someten a prueba a todas las unidades de la misma forma.
Los lanzan frontalmente a 64 km/h contra una barrera deformable: este test reproduciría el encontronazo con un vehículo que circula en dirección contraria.
Después los empotran a 50 km/h contra otra barrera lateral. El golpe va directamente a la cabeza del maniquí que toma el puesto del conductor.
También se simulan impactos traseros: el coche en movimiento colisiona a 29 km/h contra un poste. Para el atropello, se embiste al “dummie" a 40 km/h. Además, hay un test especial que mide la protección a los niños.