EE.UU. abrirá sus reservas de crudo

Huracanes, conflictos en zonas productoras, crisis en petroleras, demanda disparada... Hasta ahora, daba igual lo que pasara al mercado del crudo. EE.UU. defendía que sus reservas no se tocan. Sin embargo, queda algo más de un mes para las elecciones y ahora se abre la caja.

El petróleo se toma un respiro
El petróleo se toma un respiro

El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado que usará sus reservas energéticas. Las petroleras del Golfo de México se han visto sacudidas por el huracán Iván y le han pedido un préstamo de crudo. Han aceptado algo que –según los criterios que defendía la propia Administración Bush- era impensable. Siempre han argumentado que las reservas sólo se usarían en caso de emergencias, como la interrupción del suministro. Llevaban dos años sin utilizarlas (fue en otoño de 2002 por otro huracán, el Lili). Ni la guerra en Irak, ni las crisis en Venezuela, ni mucho menos la petición de la oposición demócrata lo habían conseguido. Por eso, ahora el candidato a la Presidencia John Kerry recuerda que pidió a Bush “que dejara de seguir llenado la reserva estratégica cuando los precios altos de los combustibles y las dificultades de suministro exprimen a las familias estadounidenses". E ironiza: “Pero ahora que las refinerías son las que han pedido que se les preste crudo de reserva, entonces el gobierno responde que, finalmente, estudia alguna acción". Sin embargo, muchos analistas no creen que sea por la presión de las petroleras, sino por las próximas elecciones: y no son los únicos que se dejan influir por estos motivos. Precisamente los demócratas, cuando Bill Clinton gobernaba, abrieron de forma limitada la reserva en 2000. Entonces, Bush le criticó por hacer política populista e intentar con dicha medida que Al Gore (el sucesor de Clinton) ganase las elecciones.Todos coinciden en señalar que, con la apertura de las reservas, el precio que pagan los conductores no bajará. “A menos que el invierno sea muy templado, el mercado parece expuesto a más subidas de precios", asegura el analista Paul Hornsell, de Barclays Capital.