Rectificar es de sabios y aquí se lo tenemos que reconocer a la DGT. Desde 2016 este organismo incorporó al Registro de Vehículos los distintivos medioambientales conocidos como las etiquetas o las pegatinas. Fueron divididos en cuatro categorías (B, C, Eco y 0 emisiones) y se fueron distribuyendo por modelo dependiendo del año de matriculación, la normativa que cumplía y el tipo de motorización. Una clasificación que, por cierto, todavía sigue siendo muy discutida.
Porque quizás no lo recuerden, pero las primeras etiquetas creadas por la DGT se enviaron directamente a los domicilios de los conductores de forma gratuita. Aquello no debió ser una buena idea, pues pocos meses después se decidió que el resto deberíamos pagar 5 euros si queríamos tenerla. Y aunque desde Tráfico no tiene la categoría de obligatoria, hay ayuntamientos como el de Madrid que sí multa por no colocarla en la luneta delantera (abajo y a la derecha, recuerden).
Pero más allá de esto, y es el motivo de este artículo, muchos conductores se empezaron a dar cuenta que a sus coches se les había asignado una etiqueta por la fecha de su matriculación, pero por normativa les correspondería una superior. Empezaron a recurrirlo y finalmente la DGT ha tenido que reconocerles el error y cambiarles su pegatina.
Así se hace para que te cambien de una etiqueta B a la C
Por si acaso eres uno de los afectados, aquí te vamos a explicar qué debes hacer para que la DGT te cambie la etiqueta B de tu coche si le corresponde la C. A modo de recordatorio, los primeros son aquellos que se matricularon entre enero de 2001 y diciembre de 2005 para los gasolina, mientras que los diésel sería entre enero de 2006 y agosto de 2015. Mientras que para la segunda serían gasolina desde enero de 2006 y los diésel desde septiembre de 2015.
Y parece según se ha demostrado, la DGT siempre tomó como referencia esas fechas de matriculación y no las normativas de emisiones, también recogidas en el reglamento, y que algunos coches cumplían pese a ser anteriores a esos años arriba indicados. En el caso de los B los gasolina deben tener la Euro 3 y los diésel la Euro 4 o Euro 5, mientras que en los C los gasolina son Euro 4,5 o 6 y los diésel siempre la Euro 6.
Teniendo en cuenta la teoría lo primero que deberás hacer si no estás seguro de que te han asignado la etiqueta correspondiente a tu coche es revisar la ficha técnica del vehículo. Ahí podrás encontrar rápidamente la normativa anticontaminación con la que fue homologado, porque se han dado casos de coches de gasolina con Euro 4 que fueron matriculados antes del 1 de enero de 2006 y a los que se les dio la B cuando en realidad les correspondía la C.
Si en tu caso detectas un error como los que hemos explicado, el siguiente paso que deberás realizar es acudir al concesionario de la marca que te pille más cerca y pedir un certificado oficial de emisiones al fabricante. Aquí es donde tendrás que empezar a pagar y encima este trámite no tiene un coste definido, por lo que piensa que te podrán cobrar entre 100 y 150 euros.
Una vez lo tengas tendrás que pedir cita en una Jefatura de Tráfico para presentar la documentación que te entregaron en el concesionario. Allí te harán rellenar un par de impresos relativos al cambio que se pide y abonarás una tasa de nueve euros. Una vez cotejado te entregarán la nueva pegatina, que deberás de nuevo pagar.
