Bridgestone sorprende en Japón

A los analistas que toman de ejemplo la recuperación milagrosa de Nissan protagonizada por Carlos Ghosn, les llega un nuevo caso a seguir desde Japón. Bridgestone ha resucitado de sus cenizas: en un solo año sus acciones se han revalorizado un 23 por ciento.

Bridgestone sorprende en Japón
Bridgestone sorprende en Japón

El índice Nikkei 225, que marca las cotizaciones en el mercado japonés, ha aumentado en 2001 un 13 por ciento, pero, eso sí, este repunte parece poco significativo, si lo comparamos con el 23 por ciento que han crecido las acciones de Bridgestone.

En agosto de 2000, el fabricante de neumáticos comenzó un calvario económico y legal. El Ford Explorer era implicado en cientos de accidentes y la marca del óvalo no quería caer sola: Firestone, la filial estadounidense, también sufría un duro varapalo por parte de las autoridades norteamericanas.

Se retiraban 13 millones de neumáticos en EE.UU. y el prestigio de la compañía caía al mismo tiempo que bajaban sus acciones. Eso sí, la crisis Ford-Firestone no ha podido con Bridgestone. Los expertos atribuyen este "milagro" a su saneamiento en América del Norte, donde cerrará su fábrica más antigua, y a la rapidez con que la compañía ha resuelto las demandas legales.

Por ahora, ya ha solucionado más de 600 casos relacionados con los accidentes causados por los neumáticos supuestamente defectuosos, y sólo ha gastado 400 millones de dólares (457 millones de euros; 76.038 millones de pesetas), de los 1.050 millones de dólares reservados para gastos legales (1.199 millones de euros; 199.496 millones de pesetas).

Así, la multinacional no duda en presentar un balance de lo más optimista para el año 2002: cuadriplicará sus beneficios netos hasta alcanzar los 65.000 millones de yenes (578 millones de euros; 96.171 millones de pesetas).