El Serie 6 es la resurrección de un modelo de BMW que dejó de montarse hace una década. Coupé deportivo, este coche es un paso intermedio entre los Serie 5 y Serie 7 y confía en volver a competir con los vehículos más exclusivos de otras marcas, como la segunda generación del Mercedes CLK, el renovado Jaguar XK8 y el Porsche 911.
El BMW Serie 6 se ofrecerá con tres mecánicas distintas (todas ellas dotadas del nuevo sistema Valvetronic de la marca germana). La primera de ellas constará de un motor de 3 litros, con una potencia de 240 CV. La versión 635Ci desarrollará 272 CV, mientras que el BMW 645Ci tendrá una potencia de 333 CV.
Sin embargo, el tope de gama llegará con el M6, un modelo propulsado por un motor de 5 litros y 40 válvulas, resultado de la colaboración de BMW con el equipo Williams de Fórmula Uno. Esta mecánica será capaz de desarrollar 500 CV de potencia, necesitando menos de 5 segundos para pasar de 0 a 100 km/h.
El coche llevará un cambio manual de seis velocidades y, como opción, un secuencial de levas en el volante, posiblemente el SMG II que lleva el M3.
La fábrica de Dingolfing es la encargada de producir este coche. En sus instalaciones también se monta el nuevo y revolucionario Serie 7, con lo que ambos coches compartirán tecnología.
Entre las principales novedades del Serie 6 está el empleo de paneles de plástico y materiales composite para la carrocería que irán combinados con el acero y el aluminio en lo que BMW describe como una "inteligente mezcla de materiales". El uso de estos materiales supone cambios importantes en las cadenas de montaje y el empleo de nueva y cualificada mano de obra.
A lo largo de 2001, BMW empleó 509 millones de euros, unos 80.000 millones de pesetas, para modernizar y preparar Dingolfing. Entre las técnicas y maquinarias que se han introducido en la factoría destacan la inspección robótica de la carrocería, una sistema de pretratamiento para pintura y un robot para coser tapicerías de cuero.
También se ha mejorado el sistema de limpieza de los paneles de la carrocería, que son lavados para facilitar su encolado y ensamblado. Los robots se encargan de supervisar esta tarea automáticamente.
La capacidad productiva de la fábrica es de 1.300 unidades diarias, unas 280.000 al año. La planta monta el Serie 7 y también el Serie 5, pero puede asimilar un modelo más sin problemas.