ITV, los elementos en los que fallan los coches más viejos

A mayor antigüedad del vehículo más posibilidades de rechazo en su paso por la ITV. El estado del alumbrado, de los neumáticos y las emisiones contaminantes son los factores que motivan un mayor número de fallos graves en su primera inspección.

Alicia Fernandez. Twitter: @Aliciautopista

ITV, los elementos en los que fallan los coches más viejos
ITV, los elementos en los que fallan los coches más viejos

El porcentaje de vehículos que no superan la ITV a la primera suele ser entre el 18 y el 19 por ciento cada año, pero no afecta de igual manera a todos ellos. Y es que, mientras la relación de rechazados se queda en los vehículos menores de cinco años en torno al 8 por ciento, en el caso de los de más 15, supera el 23 por ciento. Esto es lo que ocurre en la Comunidad de Madrid, pero, según AECA-ITV, en el resto de España los resultados no son muy diferentes.

 

En el medio quedan los vehículos de entre 5 y 10 años que son rechazados en un 14,5 por ciento de los casos, y los de entre 10 y 15, con más de un 20 por ciento.

Parece lógico pensar que a mayor antigüedad, más posibilidades de que los vehículos presenten más defectos importantes. Las piezas envejecen y, si el mantenimiento no es el adecuado, los rechazos se multiplican. Nos dicen en AEA-ITV que la proporción de defectos graves más habituales entre los más viejos varían poco respecto a los de menos edad, pero es cierto que hay aspectos en los que la edad es determinante.

 

El primer lugar lo ocupan el alumbrado y los neumáticos. Un intermitente que no funciona bien, una luz fundida, un catadióptico roto, unas ruedas con desgaste irregular o con un dibujo por debajo de 1,6 mm, o unos amortiguadores en las últimas resultan muy habituales entre los vehículos de más edad. Ambos conceptos, alumbrado y ruedas suponen el 45 por ciento de los defectos graves.

  

El mal estado del sistema de frenos es otro aspecto que supone volver a pasar por la ITV, el tercero más habitual entre los vehículos. Los frenos no están directamente ligados a la edad pero sí al uso, a los kilómetros y a la conducción.

 

El cuarto motivo por el que más fallos graves se registran son las emisiones contaminantes, si bien la edad no resulta determinante para ello. De hecho los vehículos más antiguos se miden según la legislación del momento con lo que existe una mayor laxitud. Por otro lado, en lo que sí destacan los vehículos más antiguos es los fallos por el acondicionamiento exterior. Aunque sólo en torno al 20 por ciento llegan a ser calificados de graves, los vehículos más antiguos son los que más fallos de este tipo presentan, más de la mitad turismos.