A los países petroleros no les preocupa el clima

Los principales países petroleros y Estados Unidos, el mayor consumidor de crudo del Planeta, han conseguido echar abajo la cumbre climática que se ha celebrado desde el pasado día 6 de diciembre en Buenos Aires (Argentina).

El objetivo de la cumbre del clima era hacer ver a todos los países la importante y necesaria reducción de las emisiones contaminantes, para evitar catástrofes ecológicas como consecuencia del calentamiento del planeta: los objetivos de Kioto.

Uno de los sectores que mayor incidencia tiene en los niveles contaminantes de la Tierra es precisamente el transporte y, por ende, el la automoción. Pues bien, como es una de las industrias más potentes, si la unimos a la del petróleo, que está íntimamente ligada a ella, obtenemos un fuerza impresionante de decisión en estos temas. Y ha ejercicio su fuerza. Un grupo de países petroleros, encabezados por Arabia Saudí y Qatar –importantes productores de crudo-, y por el mayor consumidor de oro negro, Estados Unidos –el principal fabricantes de automóviles del Planeta-, han bloqueado la ratificación del protocolo de Kioto.

De esta manera, sólo queda negociar un acuerdo no vinculante entre Arabia Saudí, Qatar y Estados Unidos y el resto de países para intentar involucrar a los primeros y que, por lo menos, acepten reunirse de nuevo para discutir el año próximo.

El protocolo de Kioto entrará en vigor en febrero del año próximo y prevé que sea en esa fecha cuando se empiecen a negociar las acciones dirigidas a seguir reduciendo la contaminación. La primera fase de este protocolo preveía una reducción del cinco por ciento de los gases entre 1990 y 2012. Lo que ocurre es que como Estados Unidos no lo ha suscrito, hay un problema: este país es el principal emisor de gases contaminantes.