El Autódromo José Carlos Pace ha celebrado la F1 desde 1973, aunque en 1978 y luego de 1981 a 1989 se disputó la F1 en el circuito de Jacarepaguá de Rio de Janeiro. El nombre de Interlagos se debe a que la pista está construida en una zona entre los lagos Guarapiranga y Billings, creados a principios del siglo XX para abastecer de agua y electricidad a la ciudad de Sao Paulo. En 1985 pasó a llamarse Autódromo José Carlos Pace en honor al piloto brasileño que murió en un accidente aéreo en 1977. La primera y única victoria de Pace la consiguió en Interlagos.
La pista de Interlagos ha tenido diferentes configuraciones: en un principio su longitud fue de 5,031 km, pero tras una importante remodelación, a partir del año 2000 pasó a medir 4,309 km.
En carrera, los pilotos darán un total de 71 vueltas (305,909 km), mientras que en el pit lane la velocidad máxima que podrán alcanzar será de 80 km/h. El récord de vuelta rápida lo ostenta Juan Pablo Montoya con un Williams desde 2004 (1'11"473), mientras que la vuelta más rápida dada al trazado brasileño está en manos de Rubens Barrichello (Ferrari) durante la Q1: 1'09"822.
La vuelta al trazado de Interlagos es una de las más cortas del mundial, pero a la vez los pilotos la consideran una de las más intensas. La pista se caracteriza por su ondulación, se corre en sentido contrario a las agujas del reloj y cuenta con una zona revirada en su interior entre las curvas 6 y 12, con tres largas rectas entre la 3 y la 4, la 5 y la 6 y a la salida de la 14, para comenzar las famosas "S" de Senna. Los equipos tienen mucho trabajo por adelante para configurar un monoplaza con mucha carga aerodinámica en las zonas reviradas y a la vez con poca para las largas rectas.
Pirelli lleva hasta Interlagos sus compuestos súper blando, blando y medio. Es la novena vez esta temporada que los utilizan mientras que el año pasado fueron: duro, medio y blando.
Al igual que hizo el año pasado, Felipe Massa se despedirá de la F1 cuando finalice la presente temporada. Aunque parece que ahora sí que va en serio, después de los emotivos actos de despedida que protagonizó el año pasado en el GP de Brasil. El año pasado Williams tuvo que reclamar sus servicios de nuevo tras el fichaje de Valtteri Bottas por parte de Mercedes, tras el inesperado anuncio de Nico Rosberg de su salida de la F1.