Desde hace años, Audi lleva a cabo investigaciones en combustibles respetuosos con el medio ambiente desde el punto de vista del CO2, como el e-gas, la e-gasolina o el e-Diesel, todos ellos obtenidos de una forma sintética. La compañía da ahora un paso más en la producción del e-Diesel y para ello Audi tiene previsto construir una nueva planta piloto para la producción de e-Diesel en Laufenburgo (Suiza). Por primera vez, la energía necesaria procederá de una fuente renovable hidroeléctrica.
¿Qué es el e-Diesel?
El Audi e-Diesel es un biocombustible que se obtiene a partir de energía renovable, agua y CO2. El Audi e-Diesel tiene el potencial de hacer que los motores de combustión convencionales funcionen prácticamente con una huella de CO2 neutral. Para producirlo, la planta convierte el excedente de energía hidroeléctrica en combustible sintético. Se aplica el siguiente principio químico: la energía limpia generada en la estación hidroeléctrica produce hidrógeno y oxígeno a partir del agua, un proceso conocido con el nombre de electrolisis. En la fase siguiente, el hidrógeno reacciona con CO2, utilizando una tecnología de microprocesos innovadora y muy compacta. El CO2 se puede obtener de la atmósfera o de gases residuales biológicos y, como ocurre con todos los combustibles limpios, es la única fuente de carbono. En la etapa final del proceso, los compuestos de hidrocarburos son separados para dar lugar al e-Diesel y a algunas ceras que se utilizan en otras áreas de la industria.
El e-Diesel “hidroeléctrico” empieza a fabricarse en 2018
Audi tiene previsto producir las primeras cantidades de este e-Diesel en Laufenburg a principios de 2018. Para ello, el fabricante alemán de automóviles y sus socios en el proyecto, Ineratec y Energiedienst AG, van a presentar en breve la solicitud de planificación de las instalaciones, con la intención de que los trabajos de construcción de la nueva planta se pongan en marcha a principios del año próximo.
Esta es la segunda vez que Audi se asocia para establecer una planta piloto que funciona de acuerdo con el principio “power-to-liquid” (de energía a líquido), pues desde el año 2014 ha estado trabajando junto con la corporación tecnológica Sunfire en Dresden para la obtención de e-Diesel aunque con la implicación de diferentes tecnologías, tal y como te contábamos aquí. Los otros proyectos de biocombustibles de Audi incluyen su propia instalación en Werlte, al norte de Alemania, donde se produce el Audi e-gas (metano sintético) para las variantes g-tron de los A3 Sportback, A4 Avant y A5 Sportback. El constructor de automóviles de Ingolstadt también está investigando la fabricación de combustible sintético e-gasolina junto con socios especialistas.
También te puede interesar:
Así son los Audi A4 y A5 de gas
Los coches inteligentes de Audi
Audi e-tron Quattro: un SUV eléctrico en 2018
