Tras más de tres meses ya de pruebas, los drones de la DGT comienzan a convertirse en un nuevo método de control de las carreteras de lo más efectivo. En abril de este año, coincidiendo con la Semana Santa, Tráfico presentó y echó a volar a estos nuevos aparatos, tras un período de formación a 30 personas para su manejo técnico. Ahora, desde el departamento que dirige Pere Navarro nos dan nuevos datos sobre su empleo.
De momento, los drones utilizados son del tipo Matrice 200 (pesan 6,2 kg y son de color negro) y Phantom (de 1,8 kg y color blanco). Aunque la DGT ya ha repetido desde abril que de momento no sancionan directamente, sí nos indica ahora, a través de un gráfico publicado en sus redes sociales y en la revista Tráfico y Seguridad Vial, que “las infracciones registradas pueden ser utilizadas como prueba para tramitar denuncias". Pero, ¿cómo controlan ya estos dispositivos desde el aire?
Así funcionan los drones: autonomía de 20 minutos
Según informa la propia DGT, sus nuevos drones trabajan ya a una altitud operativa máxima de 120 metros, cuentan con una autonomía total de 20 minutos y pueden controlar y vigilar un radio de acción de hasta 500 metros. Toda esta zona la pueden sobrevolar equipados con cámaras ópticas de alta definición. Dado su pequeño tamaño resulta muy difícil verlos desde el coche.
Para la DGT, los nuevos drones son ya “un medio muy efectivo que requiere un operativo técnico y humano muy reducido". Aun así, obviamente, necesita de personal humano para su control y gestión de la información que recibe. Por tanto, junto a cada dron que sobrevuela siempre hay en tierra un operador que recibe las imágenes en una pantalla acoplada a los mandos de control y las transmite al instante.
Al mismo tiempo, el centro de gestión correspondiente recibe también imágenes en directo del dron sobre el estado del tráfico en la zona. Una de las ventajas del dron para labores de vigilancia es que resulta mucho más económico que los helicópteros Pegasus que también usa la DGT. Sin embargo, también resulta mucho más complicado dotarles de cinemómetros capaces de monitorizar la velocidad a la que circulan los vehículos, al contar con mucho menor espacio.
¿Cuántos drones ya sobrevuelan las carreteras?
Aunque la DGT anunció en abril que contaba de inicio con 8 drones ya operativos de control, en el Plan de Verano presentado por el Ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, con motivo de las operaciones de vacaciones y el aumento de desplazamientos, ya se confirmó la presencia de 11 drones, junto a, por ejemplo, 300 agentes de la Guardia Civil más de los habituales.
Tráfico también ha confirmado que, a lo largo de 2020, aumentará el número de estos aparatos de vigilancia, que ofrecen una “gran versatilidad, control y gran rapidez en la monitorización del tráfico", en palabras de Ana Isabel Blanco, subdirectora adjunta de Circulación de la DGT. El aumento de uso, a más largo plazo, podría suponer la desaparición de los helicópteros.
El je de la Unidad de Medios Aéreos de la DGT, Rubén López Segovia, también ha destacado en las últimas semanas que los drones representan “un liviano coste económico en caso de que se estropeen o sufran alguna avería/rotura de sus piezas". Todo, por tanto, parecen ventajas para el nuevo medio destinado a convertirse en imprescindible en los próximos años en el control y la vigilancia en carretera.
