El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, presentó ayer lunes la nueva campaña de concienciación en carretera y el nuevo dispositivo de vigilancia y regulación del tráfico de cara a este verano, acompañado del propio director de la DGT, Pere Navarro. Durante la comparecencia, explicaron detalladamente con qué medios contará la Guardia Civil para controlar las vías nacionales.
Así, durante la próxima Operación Verano, que se dividirá hasta en 4 fases en los meses de julio y agosto, la DGT contará con hasta 1.324 radares de velocidad y con 216 cámaras de control de teléfono y móvil. Pero también con los nuevos drones de vigilancia y sanción, que ya estrenó el pasado año y que habían suspendido sus operaciones durante todo el estado de alarma.
Según confirma ahora la DGT, los nuevos drones reactivarán ya su actividad el próximo día 3 de julio, viernes, fecha en la que arranca la llamada Primera Salida Operación Verano, que durará hasta el próximo 5 de julio. Es decir, todo este próximo fin de semana.
En total, la DGT asegura que dispondrá de 11 drones para regular y ordenar el tráfico, de los cuales nos confirman ya hoy que tres de ellos tienen también capacidad de denuncia. Los drones utilizados son del tipo Matrice 200, que pesan 6,2 kg cada uno y son de color negro, y modelos Phantom, mucho más ligeros (1,8 kg) y de color blanco.
Aunque en un primer momento Tráfico los tuvo a prueba, solo como vigilancia y sin capacidad de sanción, ahora vuelve a confirmarnos que algunos de ellos ya pueden tramitar denuncias. Pero, ¿cómo lo hacen? En el gráfico que adjuntamos puedes verlo, y a continuación te lo explicamos.
Así sancionan los drones de la DGT
Capaces, según los últimos detalles técnicos facilitados por la DGT, de volar a una altura operativa máxima de 120 metros, los drones cuentan con una autonomía de 20 minutos y controlan un radio de hasta 500 metros. Dotados de cámaras ópticas de alta definición, son un medio muy eficaz, difícil de ver por los conductores y que requieren un operativo técnico y humano muy reducido.
Cerca del dron que sobrevuela hay en tierra un operador que es quien recibe las imágenes del aparato a través de una pantalla acoplada a sus mandos de control, y las transmite al instante. A partir de ahí, si son susceptibles de sanción, pueden ser utilizadas como prueba para tramitar las denuncias. El centro de gestión correspondiente también recibe imágenes en directo del estado del tráfico en la zona.
