Durante los tres primeros trimestres de este 2017, en España se han matriculado más de 900.000 vehículos. De ellos, sólo el 0,49 por ciento han sido vehículos eléctricos. Un resultado que apenas deja 4.605 matriculaciones de este tipo de automóviles entre los meses de enero y septiembre y hay que tener en cuenta que para obtener esta cifra se han sumado los coches eléctricos de autonomía extendida, los híbridos enchufables o los de pila de combustible.
Sin embargo, y a pesar de que la imagen que nos deja el gráfico es que nos encontramos al mismo nivel que Italia, Grecia y los países del este de Europa, la imagen que se arroja del resto del continente tampoco es mucho mejor. Incluso, sorprende que en Dinamarca el coche eléctrico se matricule al mismo ritmo que en nuestro país. En Portugal, Irlanda, Reino Unido, Francia y Hungría, las matriculaciones de coches eléctricos apenas representan entre el 1 y el 2 por ciento del total.
Países con un nivel mayor de renta también cuentan con un mayor número de vehículos eléctricos (como Suecia, Finlandia, Noruega y Suiza), pero también hay que tener en cuenta que el valor máximo entre estos países se encuentra en un 5 por ciento de las matriculaciones totales. Noruega es el único país en el que 1 de cada 3 coches matriculados es un automóvil movido por energía eléctrica.
Problema prioritario en Europa
Como os anunciamos hace unos días a raíz de la presentación del Plan MOVALT, Europa también tiene en mente la implantación del coche eléctrico a través de incentivos a los constructores. De esta manera, aquellas firmas que más vehículos eléctricos vendan o tengan ofertados entre su catálogo podrán superar los límites de emisiones contaminantes en sus motorizaciones tradicionales en un máximo del 5 por ciento.
Además, la Comisión Europea está trabajando para que las instituciones nacionales implanten sistemas de cableado en las plazas públicas de aparcamiento con el fin de instalar estaciones de recarga en ellas en los próximos años. En España, el Plan MOVALT prevé ayudas económicas a los compradores de coches eléctricos o combustibles alternativos a la gasolina o el Diesel. Incluso los híbridos tradicionales quedarán fuera de estas ayudas.
Datos para la esperanza
Pese a todo lo anterior, la Asociación de Fabricantes de Automóviles Europea (ACEA) también ha aportado algunos datos esperanzadores en su último recuento en lo que a crecimiento del vehículo eléctrico se refiere. Aunque también da una idea de dónde veníamos.
Las matriculaciones de automóviles movidos por energías alternativas a la gasolina y el Diesel se han incrementado en un 51,4 por ciento en el tercer trimestre del año en Europa, en comparación al mismo periodo de 2016. Incluso, debemos destacar que España ha sido el país que más ha crecido entre julio, agosto y septiembre en todo el continente, con un 90,7 por ciento más de matriculaciones.
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