Desde hace ya varios años, Audi lleva desarrollando e investigando sus modos de propulsión a gas, hasta el punto de que ha fabricado su propia planta de gas en Werlte (Alemania). En estas instalaciones, se obtiene a través de un proceso altamente eficiente e-gas, un tipo de gas metano sintético de idéntica tipología química que el gas natural comprimido CNG. Pues bien, el último desarrollo en este tipo de tecnología viene de la mano del prototipo Audi A3 Sportback g-tron, cuyas primeras unidades de venta al público estarán disponibles a partir de finales de año.
Dos modos de propulsión: gas y gasolina
El Audi A3 Sportback g-tron presenta dos modos de propulsión: el denominado modo gas (con e-gas o con CNG) y el modo gasolina. En su estructura técnica, nos encontramos con varios elementos interesantes. Los primeros elementos destacados son los dos depósitos de gas situados debajo del piso del maletero (cada uno de ellos pueden almacenar hasta 7 kg de gas a una presión máxima de 200 bares). Cada uno de estos depósitos pesa 27 kg menos que uno fabricado mediante la tecnología convencional. Como ves, el principio de construcción ligera de Audi también está presente en estos dos elementos.
Los depósitos de gas del Audi A3 Sportback g-tron están compuestos por un material novedoso, una lámina de poliamida, que estanca al gas y constituye la capa interior. Por otro lado, nos encontramos con una segunda lámina de material plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) y una tercera lámina de plástico reforzado con fibra de vidrio (GFRP).
Autonomía y prestaciones
El Audi A3 Sportback g-tron también cuenta con un regulador electrónico de la presión del gas, que gestiona dicha presión según el tipo de conducción (baja presión para regímenes bajos del motor y alta presión para regímenes altos, en los que se demanda potencia y par motor). En el momento en el que la presión de los depósitos de gas baja de los 10 bares, de forma automática se cambia a modo de gasolina. Según las pruebas realizadas, con gas el Ae Sportback g-tron recorre unos 400 km y otros 900 km con gasolina; así pues, la autonomía total puede alcanzar cifras próximas a los 1.300 km.
El funcionamiento del Audi A3 Sportback g-tron presenta otras interesantes peculiaridades. Por ejemplo, después de repostar y a temperaturas muy frías, el motor arranca primero en modo de gasolina y cambia después lo más rápidamente posible y de forma automática al modo de funcionamiento con gas.
Pero, ¿qué motor impulsa al Audi A3 Sportback g-tron? En este caso, Audi se impulsa con un motor 1.4 TFSI de 110 CV adaptado para funcionar con gas y gasolina, para lo que se han tenido que hacer diversos ajustes en la culata, en el turbocompresor, en el sistema de inyección y en el catalizador. ¿Y las prestaciones? Según los diversos tests realizados, esta eficiente versión del A3 Sportback es capaz de alcanzar los 190 km/h con una aceleración de 0 a 100 km/h en 11 segundos. El consumo medio de gas es de 3,5 kg a los 100 km. En cuanto a emisiones directas de CO2, se anuncian unos niveles por debajo de los 95 g/km.
